El pasado domingo día 7 de mayo, mi madre fue ultrajada por un mal llamado conductor de autobuses de Jerez de la Frontera, ya que en un horario regular de domingo, más en concreto la línea 8 de circunvalación, y a la altura de la Residencia de Ancianos de La Granja, esperábamos a la unidad que pasaba por dicha parada a las siete de la tarde, que por cierto, llegó tarde.

Al montarse mi madre, de 84 años de edad, y picar su bonobús de pensionista, le dijo este conductor que o pagaba o que se bajara, con un tono de mando y no muy comprensivo.

Cuál fue mi sorpresa, que aún no me había montado y estaba oyendo desde abajo con incredulidad el trato a una persona mayor jerezana de la tercera edad.

Entonces le dije a mi madre y a mi mujer que se apearan del autobús aunque ella ya había pagado un servicio, al picar su bonobús de pensionista. La empresa Cojetusa no cumplió al no realizar el oportuno servicio a mi madre, ya que se bajó de dicha unidad por mandato del conductor, y un poco de mía.

Señora alcaldesa, como verá, se atropelló a una anciana de Jerez por parte de un servicio municipal. Espero que tome nota.

Carlos Roldán Carrera. Jerez