Vista de un ramo de rosas al lado de una fotografía del embajador de Rusia en Turquía, Andrei Karlov, titoteado este lunes en Ankara
Vista de un ramo de rosas al lado de una fotografía del embajador de Rusia en Turquía, Andrei Karlov, titoteado este lunes en Ankara - EFE

¿Quién era Andrei Karlov, el embajador ruso en Turquía tiroteado este lunes?

El diplomático, de 62 años, hablaba ruso, inglés y coreano. Obtuvo el cargo que hasta ahora ostentaba en el país otomano en 2013

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El embajador de Rusia en Turquía, Andrei Karlov, asesinado este lunes en Ankara, era un diplomático experimentado que había contribuido con ahínco a la normalización de las relaciones entre su país de origen y su país de residencia, Rusia y Turquía, después de las fuertes turbulencias. El diplomático, de 62 años, obtuvo el cargo que hasta ahora ostentaba en Turquía en 2013, momento en que las dos naciones ya buscaban reforzar sus relaciones comerciales, que se habían visto afectadaspor sus posturas contrapuestas en el conflicto de Siria.

En noviembre de 2015, el acercamiento se truncó: un caza turco había abatido a un avión de combate ruso en la frontera del país otomano con Siria. Un acto que el Kremilin calificó como «una puñalada en la espalda».

Siete meses más tarde, el presidente ruso, Vladimir Putin, y su homólogo turco, Recep Tayip Erdogan, comenzaron a rreglar de nuevo sus diferencias.

Antes de vivir en Ankara, Karlov, que habla coreano e inglés además de ruso, había pasado la mayor parte de su carrera en la península coreana. Casado y con un hijo, fue embajador en Pyongyang de 2001 a 2006.

La portavoz del Ministerio de Exteriores ruso, Maria Zakharova, ha calificado este lunes de «día trágico para la historia de nuestro país y nuestro servicio diplomático». Según ha explicado, Karlov «hizo todo lo que pudo para superar la crisis de la relación turco-rusa, unos esfuerzos a los que se le ha puesto punto final de una forma trágica». Para ella, el diplomático «quería encontrar una solución para Siria y la estabilidad de la región». El atacante, un policía turco de 22 años, irrumpió en el salón de fotografía en que el embajador estaba dando un discurso al grito de «Alá es grande. No olvidéis Alepo. No olvidéis Siria».

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