El Papa está dispuesto a mediar «si ambas partes lo quieren»

Francisco aún no ha leído una carta de Maduro debido a su viaje a Abu Dhabi

EFE
Juan Vicente Boo

Esta funcionalidad es sólo para registrados

Durante el vuelo de regreso a Roma después de tres días en Abu Dhabi, el Papa Francisco comentó ayer a los periodistas que todavía no ha leído la carta de Nicolás Maduro , pero que el Vaticano está dispuesto a mediar en Venezuela «si ambas partes lo quieren».

Esto significa que, si Maduro hubiese pedido claramente en su carta una mediación, el Vaticano la aceptaría tan solo si se la pide también Juan Guaidó .

La absoluta concentración de estos días en el primer viaje de un Papa a la península arábiga ha impedido a Francisco ocuparse de otros asuntos, pero su disposición es abierta: «Veremos qué se puede hacer ». Aun así advirtió que «para que se haga una mediación es necesaria la voluntad de ambas partes, ambas tienen que pedirla».

Según Francisco, en el intento de mediación anterior -a cargo de varios exmandatarios entre los que figuraba José Luis Rodríguez Zapatero- « la Santa Sede fue parte del diálogo », pero al final «salió solo un ratoncito, humo…». Por lo tanto, «ahora veré la carta y veremos qué se puede hacer. Pero la condición inicial es que ambas partes lo quieran. La condición es que tienen que querer antes de pedir una facilitación, observación o mediación», añadió el Santo Padre durante su conversación con los periodistas.

El pasado domingo, durante el vuelo de regreso de Panamá a Roma, el Papa había manifestado su «apoyo a todo el pueblo venezolano que está sufriendo», pero evitó tomar postura con los países que ya reconocían a Juan Guaidó o con los que seguían reconociendo a Maduro , pues «si yo entrara a decir ‘háganle caso a estos países o a estos otros’ me metería en un rol que no conozco. Sería una imprudencia pastoral por mi parte, y haría daño».

Recordó que pocas horas antes, todavía en Panamá, había pedido «una solución justa y pacífica para superar la crisis, respetando los derechos humanos», y confesó que «me asusta el derramamiento de sangre . Ahí pido grandeza a quienes pueden ayudar a resolver el problema». En una valoración de su propio enfoque, el Papa añadió que «no me gusta la palabra ‘equilibrado’. Tengo que ser pastor. Y si necesitan ayuda, que se pongan de acuerdo y la pidan».

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación