Las calles de París han vivido numerosos disturbios en este Día Internacional de los Trabajadores . A última hora de la tarde de ayer, la policía había contabilizado 40 heridos y 330 detenciones , entre ellos tres españoles que portaban artefactos incendiarios y objetos que podrían servir de arma, 17.700 controles preventivos y varios heridos entre las fuerzas del orden. Cifras que evolucionaron al alza a lo largo de la noche pasada. Entre los 151.000 y los 310.000 manifestantes, en toda Francia, según las cifras oficiales de los sindicatos y el ministerio del Interior, hubo un arco iris de sensibilidades, que no siempre eran compatibles, del sindicalismo tradicional al vandalismo antisistema , de los chalecos amarillos radicales (de izquierdas) a los chalecos amarillos tradicionales (clases medias que temen la precariedad), unidos en su oposición unánime contra el presidente Macron .
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