Marine Le Pen en la presentación de su campaña este domingo en Lyon, Francia
Marine Le Pen en la presentación de su campaña este domingo en Lyon, Francia - EFE

Marine Le Pen lanza su candidatura «contra los ricos y el dinero»

La dirigente de la extrema derecha francesa promete que su primera medida como presidenta será someter a referéndum la salida de la UE

Corresponsal en París Actualizado: Guardar
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Marine Le Pen, candidata del ultraderechista Frente Nacional a la Presidencia de la República francesa, lanzó este domingo, en Lyon, las 114 proposiciones concretas de su programa electoral. Lo hizo presentándose como «candidata del pueblo, contra los candidatos de los ricos y la pasta».

Marine, como la llaman sus simpatizantes, eligió un mensaje internacional para dar el pistoletazo de salida a su campaña: «Tras el Brexit y la elección de Donald Trump como presidente de los EE.UU., el pueblo francés tomará la palabra dentro de poco. Mi primera decisión como presidenta será convocar un referéndum para proponer el Frexit, la salida de Francia de la Unión Europea», anunció.

Ante más de diez mil simpatizantes, exaltados, gritando hasta desgañitar «¡Marine presidenta! ¡Marine presidenta!» la candidata del FN desmenuzó un ambicioso programa de ruptura de Francia con la UE, la OTAN y las instituciones que rigen el comercio internacional, para «mejor proteger» su «identidad» nacional contra el «capitalismo apátrida», contra «el liberalismo mundializado» contra «el multiculturalismo que destruye nuestra identidad desde dentro», contra «la inmigración incontrolada que nos amenaza desde fuera».

El programa electoral de Le Pen fue aclamado con gritos de júbilo y banderas nacionales ondeando a todo trapo entre sus simpatizantes de viejo y nuevo cuño (mucho joven proleta, muchos jubilados inquietos, nuevos cuadros ambiciosos, etc.) Contiene 114 medidas divididas en siete puntos: 1, Una Francia libre; 2, Una Francia más segura; 3, Una Francia próspera; 4, Una Francia justa; 5, Una Francia orgullosa; 6, Una Francia poderosa; 7, Una Francia duradera.

En ese programa de la candidata del FN cohabitan proposiciones inspiradas en la experiencia del Brexit y Donald Trump, hábilmente mezcladas con posturas que la extrema derecha francesa comparte con la extrema izquierda populista. Elegida presidenta, su primer viaje sería a Bruselas, para «comunicar» a la UE su decisión de convocar un referéndum nacional, destinado a proponer al pueblo francés el Frexit, la salida de la Unión. En paralelo, la candidata del FN propone una renacionalización de la política económica (ruptura con el Pasto fiscal europeo), instauración de políticas proteccionistas, instauración de una «fiscalidad nacional», penalizando a las empresas que contraten «extranjeros».

Para conseguir una Francia «más segura», Marine Le Pen desea romper con los Acuerdos de Schengen, donde se funda el empantanado proyecto de política de seguridad interior y control de las fronteras comunes. Rota la relación de Francia con el espacio policial de Schengen, la candidata ultra desea «renacionalizar la seguridad interior», con expulsiones «masivas» y cierre «hermético» de las fronteras.

Consumada la ruptura con la disciplina del Pacto fiscal europeo, Marine Le Pen estima que Francia será más próspera haciendo suyas proposiciones que comparte con Donald Trump, los comunistas y la extrema izquierda francesa: «producir francés», «consumir francés», «proteger la industria nacional, castigar la mundialización cosmopolita», esos son los lemas de la candidata.

Con el fin de promover una Francia «más justa», Marine Le Pen hace proposiciones que comparte parcialmente con Jean-Luc Mélenchon, candidato de la coalición Francia insumisa, formada por los comunistas y la extrema izquierda, que, como ella, aboga por las ayudas estatales para favorecer a los «sectores necesitados».

«Orgullo nacional»

El capítulo programático del «orgullo nacional» comienza con un referéndum, destinado a «prohibir» el multiculturalismo, esencialmente islámico, que pudiera ser inscrito en la constitución. Tras ese proyecto, Marine Le Pen avanza propuestas de tono nacional-patriótico: reformar la carta magna para defender la «prioridad nacional» ante los extranjeros y las amenazas multiculturales, poniendo el acento en el islam; promover una «laicidad totalmente contraria a cualquier multiculturalismo»; la retirada de la bandera europea de todos los edificios públicos; rechazar cualquier «discriminación positiva» favorable a las «minorías étnicas y culturales».

El programa de la candidata del FN culmina su proyecto mesiánico con una restauración de la Francia «eterna», «inmortal», «más duradera que nunca», apelando a una restauración cultural basada en la enseñanza escolar de «la gran novela histórica de nuestra nación». Los sondeos auguran que Le Pen se impondrá en la primera vuelta con claridad.

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