Crisis en los conservadores portugueses: dimite su secretario general
Feliciano Barreiras se marcha solo tres semanas después de que le nombrara el nuevo presidente del PSD, Rui Rio
Se busca secretario general. Esa es la demanda que urge a los conservadores portugueses un mes después del congreso nacional en el que tomó posesión Rui Rio como nuevo presidente .
El exalcalde de Oporto anunció una nueva era en el PSD, incluido un reluciente marco de relaciones con los socialistas, y apostó por Feliciano Barreiras como secretario general tres semanas atrás. Pero ahora la crisis les ha estallado en las manos a uno y a otro.
Barreiras ha estado perseguido por la polémica desde el primer instante , pues la oposición en su contra crecía sin demora, con los seguidores de Passos Coelho a la cabeza. En este contexto se descubrió que varios datos de su bagaje estaban falseados: por ejemplo, nunca ejerció como profesor invitado en la Universidad de Berkeley. Para colmo, cobraba un plus por dietas y desplazamientos como si residiese a 83 kilómetros de Lisboa, cuando en realidad vive en la capital portuguesa.
Así las cosas, la presión ha ido en aumento y la dimisión no se ha hecho esperar, con los consiguientes ecos en la trayectoria del propio Rui Rio , quien ya estaba tocado por su incapacidad para dar cohesión al partido.
Deslices
¿Conocía Rui Rio estos ‘deslices’ del ex secretario general? En caso de respuesta afirmativa, ¿por qué lo nombró entonces? Si la contestación fuese negativa, ¿cómo es posible que no lo conociera en profundidad?
Nada extraño, por tanto, que l Assunçao Cristas os centristas del CDS, con la hiperactiva al frente, traten de recoger los frutos y captar parte de su espectro político, descontento con los titubeos de las últimas semanas.
Según el comunicado de dimisión de Barreiras, tomó la decisión a causa de la «violencia inusitada de los ataques que he recibido, con consecuencias tanto para mí como para mi familia». Y añade: «Estoy en el combate político desde mis tiempos de estudiante y sé que es una batalla dura. Pero creo que todo no vale y que es intolerable que mis familiares se vean expuestos».
La reunión del Consejo Nacional de los conservadores (máximo órgano entre congresos) está marcada para el 28 de marzo y de ahí deberá salir su sustituto.
De acuerdo con sus argumentos, «sabía que podía ocurrir una cosa de este tipo y que el afectado podía ser yo o cualquier otro miembro de la nueva dirección».
De hecho, siempre a partir de sus explicaciones, «es público que, nada más terminar el congreso de marzo, otros colegas míos sufrieron alguna clase de ataque, y hasta el mismo Rui Rio».
Refundación
Los conservadores lusos vivieron su refundación en el citado encuentro, celebrado hace unas semanas. Poco antes, Rio había dado la sorpresa en las elecciones internas al batir al «resucitado» Pedro Santana Lopes.
Los dos terminaron por sumar fuerzas para elegir listas de consenso a la dirección del PSD, aunque la paz no se mascaba en ningún momento y la obsesión por recuperar terreno llevaba (y lleva) a un dilema trascendental: ¿cómo se pueden ganar las elecciones de 2019?
A Rui Rio le piden ahora que no mire a otro lado, y él es consciente de que los días del apogeo de Passos Coelho le van a perseguir, pues ganó dos elecciones legislativas y solo la pérdida de la mayoría absoluta en 2015 le convirtió en víctima de la maniobra socialista para compincharse con los comunistas y el Bloco de Esquerda.
El ex primer edil de Oporto lleva meses mostrando intenciones de acercamiento al Partido Socialista , como se reflejó durante la campaña previa al combate con Pedro Santana Lopes por la presidencia del PSD. Eso genera división de opiniones en el seno del PSD, e incluso hay quien apunta a este telón de fondo como explicación última de los ataques ahora registrados.
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