Calles con sabor: calle Plocia de Cádiz

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

La calle Plocia es una de las más emblemáticas de la capital gaditana. Su recorrido es el nexo entre el templo de la Patrona de la ciudad, la Iglesia de Santo Domingo, y el Ayuntamiento gaditano. En ella aún se puede contemplar la majestuosa entrada de la antigua Fábrica de Tabacos, hoy convertida en Palacio de Congresos, y su ubicación conforma la confluencia de quienes llegan a la ciudad por mar, en tren y en autobús.

Se podría decir que, a día de hoy, la calle Plocia se ha convertido en la ‘milla de oro gastronómica’ del casco histórico de Cádiz ya que en ella existen un total de 16 establecimientos hosteleros de una amplia variedad y para todos los gustos.

Están los clásicos bares de tapas, asadores, marisquería, hamburguesería, restaurantes donde la especialidad son los pescados frescos de la Bahía, cocina internacional acompañada de cerveza artesana o tabernas que invitan a la tertulia con un vaso de vino en la mano.

Comenzamos nuestro recorrido desde la Iglesia Conventual de Santo Domingo en dirección hacia la plaza de San Juan de Dios. En la esquina de nuestra izquierda encontramos The Cabin, un local de estilo americano donde los nachos, hot dogs y hamburguesas se maridan con una amplia variedad de cervezas premium, muchas de ellas artesanales, donde prima la firma Maier, elaborada en Cádiz.

A continuación, merece la pena detenerse en El Aljibe, un coqueto restaurante de cocina tradicional y estilo rústico, donde se puede tapear o comer a la carta, en la que predominan platos típicos andaluces con pequeñas pinceladas de innovación. Ensaladas, cremas, arroces y pastas, pescados, carnes y aves, e incluso menú degustación. Todo un abanico de posibilidades para atraer a todos los públicos. Micuit de corzo, crepe relleno de langostinos y berberechos, las clásicas tortillitas de camarones, carpaccio de atún de almadraba o brocheta de rape y verduras en salsa de gambas son algunos de los platos que merece la pena probar.

La sorprendente transformación del antiguo horno La Gloria ha dado paso a un asador argentino donde lo primero que llama la atención es su cuidada decoración. La Chancha y los 20 ofrece un espacio amplio y acogedor donde se pueden degustar las mejores carnes de aquí y de allá elaboradas a la parrilla de carbón de encina. Un auténtico paraíso para los amantes de la carne a la brasa para saborear diferentes cortes de angus, macho castrado, buey, vaca rubia gallega o nuestra ternera retinta.

Siguiendo nuestro recorrido en dirección hacia la plaza de San Juan de Dios, encontramos un pequeño bar de tapas de los de toda la vida: el café bar Casa de Postas, con las recetas de siempre y cocina casera. Otro nuevo inquilino en esta calle tan concurrida es La Mar de Gambas, una franquicia sevillana que se presenta en Cádiz en formato “gourmet”. Su concepto es el de la clásica cervecería donde se sirve Cruzcampo bien fría acompañada de un plato de marisco o pescaíto frito. Su amplia variedad de tapas recoge lo mejor del tapeo sevillano y gaditano donde se puede degustar solomillo al whisky, flamenquín, chanquetes con huevos fritos y pimientos asados, atún encebollado, aliño de huevas cocidas o chicharrones.

En la siguiente esquina se ubica la Tapería D’Cortés, con una amplia carta de tapas caseras donde no faltan los guisos del día, revueltos, carnes a la plancha y gratinados al horno. Otra de las novedades de este 2018 en la calle Plocia ha sido La Fragua, un restaurante especializado en carnes a la brasa donde también se pueden degustar platos de cocina de producto elaborados por el chef Manuel Cortés. Cocktail de mariscos, champiñones rellenos, suprema de salmón o guisos de cuchara son algunas de las sugerencias.

Llegados a este punto debemos mirar también hacia nuestra derecha donde, tras dejar atrás la fachada del Palacio de Congresos, aparece Alamar, el restaurante del grupo Potito en el centro de Cádiz, donde el producto estrella es el pescado fresco de la Bahía.

De nuevo a nuestra izquierda vemos La Bodeguita de Plocia, un lugar ideal para tapear en barra. Cocina casera y un amplio abanico de sugerencias frías y calientes. Chacinas, quesos, una gran variedad de carnes ibéricas como solomillo, presa, albóndigas, pinchos y carrillada, tampoco faltan las verduras como el calabacín a la plancha con rulo de cabra gratinado, alcachofas rellenas de morcilla, espárragos de Navarra rellenos de langostinos o milhojas de berenjenas, sin olvidar las empanadillas caseras o la ventresca de atún a la plancha.

Junto a la Bodeguita de Plocia se ubica todo un clásico de la zona, La Cepa Gallega. El local conserva la esencia de los ultramarinos de antaño donde el cliente puede comprar los selectos productos para llevarlos a casa, o bien degustarlos en el momento acompañados de un vaso de vino o una cerveza. Bacalao desmigado, chicharrones especiales, chorizo picante, quesos de la Sierra, chacinas de primera calidad, conservas de atún de Barbate o las mejores anchoas del Cantábrico maridan a la perfección con una ingente cantidad de referencias de vinos, muchas de ellas del marco de Jerez, aunque también ofrecen tintos con nombres propios de toda la geografía española y vermut de barril para ir abriendo boca con un aperitivo.

Llegamos al restaurante Atxuri, un establecimiento con más de 70 años de historia que lo han hecho ser toda una institución en la capital gaditana por su cocina vasco-andaluza, que sigue atrayendo a clientes de toda la vida y otros recién seducidos por sus especialidades. La esencia de Atxuri se mantiene en su cocina tradicional, en el amor a la tierra vasca que cuelga en sus paredes y a su materia prima de primera calidad. Cocotxas en salsa verde procedentes de San Sebastián, morcilla de Gernika, anchoas de Bermeo, que preparan una a una, y el típico bacalao al pil pil o la andaluza.

Volvemos a mirar a nuestra derecha donde se ubica el bar de tapas Garum en el que se sirven tapas y raciones de siempre acompañados de pescado fresco de la Bahía. Calamar relleno, chipirones encebollados, marrajo a la plancha, gallo empanado, ortiguillas, salmonetes, acedías, tortillitas de camarones, pijotas, lubina a la plancha y guisos típicos gaditanos como las papas con chocos o garbanzos con langostinos son algunas de las sugerencias que podemos leer en sus pizarras.

Junto a la antigua Casa de Hermandad de las Cigarreras se encuentra El Arco de Plocia, regentado por los mismos propietarios que La Bodeguita de Plocia. Su propuesta gastronómica se basa en la cocina tradicional gallega con pescados, mariscos, carnes y caldos de gran calidad que son la base para recrear en Cádiz experiencias que nos transportan a las tascas de Santiago de Compostela. Sabores gallegos hechos en Cádiz como las empanada de zamburiñas, de pulpo, de mejillones, lacón al horno y con grelos, morros a la gallega, caldeirada y cocido gallego son algunas de las especialidades que podemos encontrar en su carta.

Salicornia es la apuesta hostelera del chef gaditano Juan Höhr tras una larga trayectoria profesional dentro y fuera de nuestras fronteras. Ofrece una cocina de producto bajo el concepto de ‘slow food’, que promulga una gastronomía sostenible y basada en el disfrute donde el cocinero propone degustar el producto sin artificios, con poca intervención y preparada con técnicas tradicionales. Pulpo del Estrecho, verduras de Conil o ternera gallega, son algunos de los protagonistas d su carta donde tampoco falta el toque oriental como el gua bao de pato crujiente, la pasta yakisoba o el guiso hindú chana masala.

Vamos terminando nuestro recorrido saliendo a la plaza de San Juan de Dios donde encontramos, a nuestra izquierda, la mítica hamburguesería La Huella y a la derecha un coqueto despacho de productos gourmet de la provincia que tiene anexa una taberna en la que tomar vinos, por botella o copas, acompañado de un aperitivo. Se trata de El Chicuco, un pequeño local que quiere rememorar aquellos ultramarinos de antaño en cuya carta encontramos tostas, embutidos, chacinas y quesos, la mayoría de origen gaditano.

Ver los comentarios