Wanda Nara pone el Calcio en pie de guerra
Las últimas declaraciones de la esposa de Mauro Icardi, del Inter de Milán, abren una crisis en el club
El culebrón que apasiona a los italianos desde hace semanas no es una ficción, sino las peripecias de los argentinos Mauro Icardi (26 años), delantero del Inter de Milán, y su mujer y representante, la siempre polémica Wanda Nara (33). La pelea del matrimonio con el centenario club de fútbol ha provocado un auténtico terremoto. Wanda es una mujer de armas tomar y tiene en vilo a los jugadores del Inter, los directivos, los tifosi, los periodistas y, por supuesto, a su propio marido.
Wanda Nara, exmujer de otro jugador argentino, Maxi López , con el que tiene tres hijos, se casó en 2014 con Icardi, quien, por su parte, fue compañero de López en la Sampdoria. Tienen dos hijas. Como agente del delantero, Wanda discute contratos y tiene una presencia constante en Instagram, con casi cinco millones de seguidores, a los que «regala» imágenes picantes con sus minibiquinis y grandes escotes. Incluso se atreve a posar en plan sexy ante la camiseta «interista» de Icardi .
La exuberante argentina interviene de forma fija en el programa televisivo «Tiki Taka», está muy presente en las crónicas de sociedad, jamás se oculta y no obedece a las reglas clásicas del fútbol, que prefieren ver a la mujer en la cocina, según confiesan abiertamente algunos jugadores y entrenadores. «¡Vete a cocinar!», le espetó el sueco Ibrahimovich a Vera Spadini , reportera de Sky, cuando le preguntó por un presunto enfrentamiento con el técnico Massimiliano Allegri .
Su poderío
La argentina hace ostentación de su poderío, besa y abraza a su Mauro ante las cámaras al terminar el partido, le consuela y le asegura lograr aumentar su contrato, que termina en dos años, en un 50 por 100: desde los 5 que cobra actualmente a 10 millones de euros, porque «su» jugador merece mucho más de los 7,5 millones que le propone el club. «Gracias a mí, Mauro aumentó sus contratos en un 85 por 100 », alardea Wanda. En el tira y afloja con el Inter, la argentina se pronuncia abiertamente sobre la renovación del marido, desafía a los directivos e incluso critica a los jugadores del Inter por no pasarle buenos balones a su Maurito, hasta el punto de escribir en Twitter esta semana: «¿Renovación de Icardi? Prefiero que llegue (al Inter) uno que le haga cinco buenas asistencias». A los dirigentes del club se le sha agotado la paciencia y han adoptado una decisión drástica: quitarle el brazalete de capitán a Icardi.
La Yoko Ono del balompié
Ha estallado así el «caso Icardi», con una dimensión social sin precedentes en el Calcio. Muchos ven a Wanda como una especie de bruja y la definen como la « Yoko Ono del Inter», evocando a la mujer de John Lennon por su decisiva influencia en el devenir del cantante y de los Beatles.
La actitud de la esposa de Icardi ha abierto una revolución en el mundo del fútbol, y así se ha reflejado con una gran polémica y debate en todos los periódicos y furibundas discusiones en programas de televisión. Por ejemplo, el exinternacional del Milan Alessandro Costacurta , casado con la fascinante exmodelo y actriz Martina Colombari , llegó a pronunciar con gran vehemencia esta infeliz frase en Sky: «Si mi mujer hubiera dicho las cosas de Wanda metiendo en medio a mis compañeros, yo la echo de casa». Costacurta se dio cuenta al día siguiente de su grave equivocación y rectificó en una entrevista. Otro exinternacional, Fulvio Collovati , campeón del mundo en 1982, sentenció: «Cuando oigo a una mujer hablar de táctica en el fútbol, se me revuelve el estómago». Collovati, comentarista fijo de la RAI, ha sido suspendido durante dos semanas por la televisión italiana. La ira de algunos tifosi contra Wanda se ha traducido en mensajes amenazantes y a la agresión de un alocado que le tiró una piedra contra un cristal de su coche cuando llevaba a uno de sus cinco hijos a jugar al fútbol.
Muchas son también las voces que se han alzado para defender a Wanda Nara por su coraje para combatir el patriarcado en el fútbol, donde, por cierto existen excelentes periodistas deportivas amadas por el público, como Ilaria D’Amico , la mujer del portero internacional Gigi Buffon . «El problema es la cultura. Pero lo que ha dicho Fulvio Collovati lo piensa el 90 % de los italianos. Los hombres sufren con las mujeres al mando y tampoco soportan que tengan capacidades para hablar de fútbol», afirma Alba Parieti , exactriz y presentadora televisiva.
Tres cosas a la vez
El culebrón continuará . Ayer mismo, «Il Corriere della Sera» se hacía eco de la declaración del escritor y periodista Giancarlo Dotto , quien, parafraseando al poeta y novelista Charles Bukowsky , dijo: «Dios creó a la mujer extendida en la cama…». Le respondió la actriz Claudia Gerini , apasionada seguidora de la Roma: «Decidle a Giancarlo Dotto que las mujeres son capaces hoy de hacer tres cosas a la vez: hablar de fútbol, revisar el balance de una empresa y hacer el amor, incluso en vertical».
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