La «viuda negra de Gucci» renuncia a parte de su herencia para recuperar a su familia
Patrizia Reggiani se ha manifestado en el medio italiano «Storie Italiane» que quiere llegar a un acuerdo económico con sus hijas para poder ver a sus nietos, así como de disfrutar de algunos bienes de los descendientes de Maurizio Gucci
Muchas veces, la realidad supera la ficción y a día de hoy, cada capítulo que protagoniza Patrizia Reggiani , sigue confirmando este dicho. La que fuera mujer de Maurizio Gucci , apodada como la «viuda negra» de Italia por ordenar el asesinato del nieto de Guccio Gucci , renuncia a la parte de la herencia que le corresponde -un millón de euros anuales, ya que el juez consideró hace un año que programar la muerte de su exmarido no era motivo para ignorar el acuerdo de divorcio- con el fin de disponer de un chalé y un barco familiar y de poder ver a sus nietos.
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El punto de partida de esta historia se ubica en 1973, año en el que Gucci y Reggiani se casaron. Tras doce años de matrimonio, el empresario abandonó a su esposa por otra mujer más joven. Tiempo después, en 1991, firmaron un acuerdo de divorcio que aseguraban una pensión de por vida para la exmujer: un millón de euros al año .
Una cantidad muy jugosa tras la que se escondía un plan muy oscuro. En 1995, un sicario relacionado con la mafia – contratado por Reggiani- acertó a dispararle a Gucci cuatro tiros por la espalda. La «viuda negra» fue condenada y pasó 16 años en la cárcel .
Cuando salió de prisión y después de que la justicia le concediera esta pensión vitalicia, Patrizia acabó enfrentada con sus hijas por la herencia. Alessandra y Allegra Gucci Reggiani se opusieron a que su madre recibiera este dinero y recurrieron a la Corte de Apelación de Milán. Tras la negativa de esta institución, las jóvenes estudian llevar el caso hasta el Tribunal Supremo de Italia.
La familia
Con esta situación como antecedente, la viuda de Gucci, que ahora trabaja como asesora de estilo en una tienda de Milán, ha anunciado que quiere rechazar el dinero. Según ella mismo ha manifestado en una entrevista exclusiva al medio «Storie Italiane», toda esta estrategia vendría motivada para poder disfrutar de más tiempo con su familia.
Su abogado, Daniele Pizzi , también ha apuntado a esto como el desencadenante de este nuevo giro, a cambio de una cantidad de dinero más moderada, por supuesto. Ahora, ambas partes se encuentran a la espera del 10 de octubre para estudiar la situación y llegar a un acuerdo económico ante las autoridades de conciliación suizas.
Según el letrado, Reggiani solo pretende «reconstruir los lazos familiares» ; respecto a las propiedades -el velero «el Creole» y la vivienda en Saint Moritz-, ella solo pide tener acceso y que sean sus hijas las que «se ocuparan de mantenerla».
