Maltrato y soledad, los últimos años del padre de Spiderman

Stan Lee, fallecido esta semana, sufrió las vejaciones de su hija Joan, su única heredera

Stan Lee y su mujer Reuters

María Estévez

Fue uno de los padres de la cultura pop, el genio en torno al cual orbitó el imperio Marvel (del cómic al celuloide), el creador de docenas de personajes legendarios que contribuyeron a transformar la mentalidad de las nuevas generaciones a comienzos de la prodigiosa década de los 60. Stan Lee murió esta semana en su casa de Hollywood, a los 95 años de edad. Nacido en Nueva York el 28 de diciembre de 1922, en el seno de una humilde familia de origen rumano, en la última etapa de su prolífica existencia se había convertido en una caricatura de sí mismo, con extrañas apariciones en eventos multitudinarios y cameos en las películas de sus personajes. Su profundidad para entender la naturaleza humana y para desarrollarla en sus comics tuvo su época estelar entre 1961 y 1971. Sin embargo, de todos sus personajes, el más complicado fue sin duda el suyo mismo: creador con rasgos de egomaniaco, escondía una confusa realidad.

Lee, padre de Spiderman, Hulk o Iron Man , necesitaba un superhéroe para salvarse de su terrible situación personal. O al menos eso se escribió en la revista «The Hollywood Reporter» el pasado mes de abril. Según una investigación, el escritor y guionista sufría maltrato por parte de su hija Joan Celia (67 años), fruto de siete décadas de matrimonio con Joan Clayton Boocock Lee -fallecida el pasado año-. Fue después de un cuadro de neumonía que se presentó en febrero, cuando Stan Lee acudió al despacho de su abogado, Tom Lallas , y firmó un documento en el que daba fe de los abusos que padecía. Lee había creado un fideicomiso para su hija, pues temía que una vez que él hubiera pasado a mejor vida, ella «se convirtiera en una indigente».

Hoy Joan es quien hereda la fortuna familiar , cifrada entre 50 y 70 millones de dólares. Entre los documentos que «The Hollywood Reporter» aportó se encuentra otro donde se plasman las exigencias de Joan de cambiar ese fideicomiso, transfiriendo propiedades de su progenitor a su nombre. Además, en el reportaje deja bien claras las diferencias entre padre e hija. «Me grita y llora de manera histérica, si no accedo a lo que quiere», aseguraba el escritor y guionista.

Malas intenciones

La revista menciona también a tres hombres «con malas intenciones», que forman parte del circulo más cercano de la hija de Stan Lee: Jerardo «Jerry» Olivarez, Keya Morgan y el abogado Kirk Schneck , quienes manejaban a su antojo a Joan. Así se lo hizo saber el propio Stan Lee a Tom Lallas cuando firmó el documento sobre los abusos a los que estaba sometido.

Sin embargo, días después de que la declaración fuera registrada legalmente, Stan Lee se retractó de la misma y prescindió de los servicios de Lallas. Así, Joan y sus tres hombres de confianza estrecharon aún más el círculo en torno a Stan. Tras el despido del abogado, llegaron las restricciones al que fue el asistente personal del creador durante más de dos décadas, Mike Kelly , a quien le limitaron las visitas. También se despidió al servicio que durante años había estado trabajando para el padre de Spiderman y se contrató a un nuevo gestor, jardinero y ama de llaves. Por último, se le impuso un nuevo asistente: J onathan Freund .

Cuando Joan Lee se enteró de que «The Hollywood Reporter» tenía los documentos que describían el maltrato hacia su padre, obligó a Stan Lee a grabar un vídeo en el que aseguraba que las declaraciones y las pruebas aportadas eran «totalmente incorrectas, inexactas, engañosas e insultantes». Añadió que la relación con su hija «nunca ha sido mejor» . La investigación de «The Hollywood Reporter» también había detallado, con la confirmación de varios testigos, una tremenda pelea entre padre e hija antes del fallecimiento de la esposa de Stan Lee. La discusión comenzó a propósito de un Jaguar y acabó con Joan tirando a su madre al suelo y golpeando a Lee en la cabeza.

«Jamás he tocado a mi padre o a mi madre. Nunca. Lo que ocurrió entre nosotras es que mi madre estaba muy enferma y hubo gente que habló sin saber. Todos ellos forman parte de una conspiración», se defendió Joan Celia tras la publicación del reportaje. Precisamente fue ella quien, el pasado 12 de noviembre, anunció al portal «TMZ» la muerte del creador del universo Marvel, leyenda de la cultura norteamericana.

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