Pitones, cocodrilos y cetáceos... las apariciones más desconcertantes de Madrid

Cuando se encontraron estos especímenes generaron alerta y pánico entre los vecinos

Cetáceo encontrado en la Casa de Campo en 2003 POLICÍA MUNICIPAL

S. L.

Madrid no es una ciudad que se caracterice por incluir extravagantes razas animales, por lo que cuando aparecen especies peligrosas o extrañas, lo normal es que cunda el pánico . Desde pitones hasta cocodrilos o cetáceos son algunos de los animales que se han encontrado en la capital donde uno menos se lo esperaba.

Una pitón en casa

Pitón encontrada en una casa

Sin irnos más lejos, el mes pasado una mujer en Ciempozuelos se llevó un gran susto. En plena madrugada, cuando se levantó de su cama para ir al cuarto de baño, se dio de bruces con una serpiente pitón de al menos un metro de largo . Se trataba de una python regius no venenosa, pese a su apariencia.

Los agentes, alertados por la dueña de la vivienda, creen que el ofidio pertenecía a algún vecino y que se escapó del terrario y se introdujo en el piso. Carecía de microchip y no estaba dado de alta como animal doméstico, por lo que no se pudo interponer ninguna denuncia.

Un cetáceo muerto en Casa de Campo

Hace dos años, la Policía Municipal de Madrid localizó en la Casa de Campo un cetáceo, que creen que podría ser un delfín en estado de descomposición . Después de esta noticia, la Unidad de Medio Ambiente de la Policía comenzó una investigación.

El cadáver fue encontrado junto al carril bici de la Casa de Campo por un ciudadano que estaba paseando a sus perros por la zona. Fueron las mascotas quienes le llevaron hasta los restos del aniaml enterrado y envuelto en una malla metálica. El Zoo de Madrid confirmó que se trataba de un cetáceo.

El misterio del cocodrilo

En 2003, el embalse de Valmayor se mantuvo cerrado durante unos días después de que algunos vecinos de la zona aseguraran la existencia de un cocodrilo . Se movilizaron muchos guardias civiles y se formó una expedición formada por miembros de las fuerzas de Seguridad del Estado y del canal de Isabel II, que confirmaron que dos reptiles campaban a sus anchas en este madrileño embalse .

Sin embargo, los especímenes nunca llegaron a aparecer y la incógnita sobre su verdadera existencia aún continúa sin resolverse .

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