Cifuentes critica la «doble vara de medir» con los escraches

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, ha criticado hoy que exista una «doble vara de medir» a la hora de valorar los escraches después de que ayer sufriera uno el concejal de Seguridad del Ayuntamiento de la capital, Javier Barbero, un hecho que la popular también ha condenado. Además, ha manifestado que «jamás» defenderá un escrache ya que «son una forma de coacción inaceptable» pero ha incidido en que no se pueden usar «diferentes varas de medir según sea el destinatario».

Así lo ha asegurado esta mañana, durante la presentación de un plan para impulsar el pastoreo como medida de prevención de incendios, recordando haber vivido situaciones similares cuando era Delegada del Gobierno. «A mí me hicieron uno en la puerta de mi casa con mi hijo mirando desde el balcón, que no fue precisamente pacifico porque si no me meto en un restaurante que estaba abierto aquello termina con violencia física», ha destacado.

«Cuando los hacen ellos es libertad de expresión y cuando los sufren, fascismo», ha dicho sobre las quejas manifestadas por Ahora Madrid sobre el «acoso» que vivió ayer el concejal de Seguridad. Cifuentes también ha asegurado haber echado de menos «voces de apoyo» cuando ella fue víctima de este tipo de hechos. «Creo que hay que ser un poco serio y riguroso y efectivamente condenar ese tipo de manifestaciones que van más allá del derecho de manifestación», ha aseverado al presidente.

Asimismo, ha añadido que «siempre ha defendido el derecho de manifestación» y ha apuntado que la concentración de ayer de los policías municipales era «legal». «Los policías locales y nacionales también tienen este derecho reconocido», ha asegurado.

Por último ha recordado a Barbero que algunos de sus compañeros de filas no sólo defendieron este tipo de hechos violentos sino que «participaron activamente en todo tipo de escraches». «Yo recuerdo un escrache que se le hizo a la señora Rosa Díez que fue alentado protagonizado por el nuevo líder de la nueva izquierda el señor Pablo Iglesias», ha concluido.

Cifuentes había hablado ya sobre este asunto esta misma mañana, en una entrevista en la Cadena Cope, en la que ha lamentado que entonces, los mismos que ahora sufren los escraches y los tildan de «fascismo y delito» los defendieran al calificarlos como actos que respondían a la «libertad de expresión». «El escrache es una forma de violencia», ha zanjado la presidenta regional.

[ Las declaraciones están disponibles en el siguiente enlace]

«Las manos limpias»

Cifuentes, que recientemente ha sido nombrada presidenta de la gestora del PP de Madrid ha considerado también que, más que una «limpia», lo que el PP de Madrid necesita es renovar las estructuras y «sacudir las sábanas» como cuando una persona llega a una casa después de mucho tiempo.

Cifuentes ha hecho estas declaraciones tras varias preguntas sobre hasta qué punto tiene libertad para realizar cambios en la formación que ahora dirigirá tras la dimisión de Esperanza Aguirre.

La presidenta autonómica ha recalcado que tiene las manos libres «para tomar las decisiones que tenga que tomar» en el PP de Madrid, al que llega debido a un «vacío de poder absoluto» y con la necesidad de motivar al electorado.

A la pregunta de si la formación madrileña necesita una «limpia», Cifuentes ha asegurado que no sabe si ese «concepto» es el correcto.

«Limpia, yo no sé... Si hay que renovar las estructuras», ha precisado, como cuando al llegar a una casa después de tiempo hay que «sacudir las sábanas».

[ Escucha estas declaraciones en el siguiente enlace]