El PSOE vota por Madrid Central pero propone un retraso para «perfeccionarlo»

Ahora Madrid vuelve a solicitar la entrada en el accionariado de Metro pero la Comunidad le responde que es «una competencia supramunicipal»

La estación de Metro de Nuevos Ministerios, desbordada de gente Maya Balanya

Sara Medialdea

La alcaldesa Manuela Carmena y Ahora Madrid ya tiene en contra, en el proyecto de Madrid Central, al PP y Ciudadanos, a los empresarios -que piden que se retrase hasta después de la Navidad- y al Gobierno regional -que exigió formalmente su suspensión hasta que se estudien medidas que ayuden a su implantación-. Y ahora además el PSOE, habitual socio del gobierno municipal en muchas votaciones, da un paso a un lado, aunque con incoherencias entre la dirección regional y el grupo municipal: el secretario general del PSOE en Madrid, José Manuel Franco, ha dicho que son partidarios de un retraso en la aplicación del plan para ajustar la oferta de transporte público y cerrar los «flecos» pendientes porque «no se puede improvisar» en un tema tan serio.

El grupo municipal del PSOE ha votado este jueves en contra de la paralización del proyecto en el pleno extraordinario que se ha celebrado en el Palacio de Cibeles a petición del PP. Pero a pesar de ello, explica Franco, instarán que se abra un diálogo amplio con los sectores afectados -hostelería, comercio, padres de alumnos- para buscar soluciones y «que no haya perjudicados». Los socialistas no están en contra del plan, explica Franco, porque de hecho la idea partió de ellos, recuerda, pero creen que hay que «perfeccionarlo» y proponen tiempo y diálogo para hacerlo. «Queremos un plan serio y la planificación adecuada».

Los Gobiernos autonómico y municipal se enfrentan estos días por la aplicación del programa que restringirá al tráfico privado la almendra central de la capital. Desde Ahora Madrid han puesto en duda la capacidad del Metro para hacerse cargo del incremento de demanda previsto. Pero la consejería de Transportes afirma que cuenta en la actualidad con 400 coches en stock preparados para incorporarlos en las próximas fechas al servicio.

En ese pleno, el Gobierno municipal tenía previsto pedir a la Comunidad de Madrid volver al accionariado de Metro para, paulatinamente, ir contribuyendo al mantenimiento del déficit de la tarifa; exigirá inversiones «para recuperar niveles de servicio óptimos » y plantea de nuevo prolongar la línea 11, al menos entre Plaza Elíptica y la línea 6 (Sainz de Baranda o Conde de Casal).

El Ayuntamiento vendió su participación en acciones de Metro en 2011, acudiado por la necesidad de inyectar liquidez en sus ajustadas cuentas municipales. Entonces, toda la compañía pasó a manos de la Comunidad de Madrid. Ahora, desde la consejería de Transporte responden al Gobierno de la capital que esa es «una competencia supramunicipal» porque afecta a doce municipios distintos. Así quedó reflejado en un cambio legal que aprobó el Gobierno autonómico de Esperanza Aguirre en 2012, justo después de hacerse efectiva la compra de las acciones.

Desde el Gobierno municipal denuncian que tras seis años de ostentar el accionariado total, el 1 de enero de 2018 el valor patrimonial había caído hasta los 359.400.000 euros y el valor de la acción se quedaba en 76,81 euros, lo que demuestra «una evidente descapitalización del suburbano madrileño a la que debe ponerse freno para viable y sostenible una empresa esencial para la ciudadanía madrileña».

Más trenes

Dicha descapitalización ha ido aparejada a «importantes ineficiencias en la gestión», por lo que hoy resulta «urgente» adquirir un número de trenes suficientes para compensar las bajas por obsolescencia y presencia de amianto, afirman .

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