Un tesoro bajo tierra en Barcelona

Bajo tierra, a 120 metros de profundidad, Santa Coloma de Gramanet podría haber encontrado su tesoro. El color anaranjado del agua ya hace sospechar, y un sensor de temperatura lo confirma: son aguas termales.  Los expertos son prudentes, pero es una cantidad que promete. Ya en 2004, durante las obras de construcción de la Línea 9 del metro se detectó agua freática caliente pero el hallazgo quedó en el olvido. Ahora, después de varios estudios geológicos, se ha confirmado que el agua llega a los 60 grados de temperatura. Un potencial que ya estudia el Ayuntamiento. Se trata de un hallazgo único. Es la primera vez que se encuentra agua termal en el área metropolitana de Barcelona. Ahora debe calcularse el caudal y, quizá, esta gran ciudad puede codearse pronto con los más conocidos destinos termales.-Redacción-