Vandalismo a pie de tumba en un cementerio coruñés

Por segunda vez en esta semana la patrulla de la Guardia Civil se desplazaba este martes al cementerio de la parroquia de Sísamo, en al ayuntamiento coruñés de Carballo. Ya lo habían hecho el lunes, tras tener conocimiento del destrozo registrado en la última ampliación del camposanto: buena parte de las flores depositadas por los vecinos ante los nichos de sus seres queridos aparecían esparcidas en el suelo. No era la primera vez que ocurría, sino que en los últimos meses ya se había producido un ataque similar. Y la situación ha abonado el terreno para las disputas vecinales : el hecho de que sólo uno de los panteones se haya librado del vandalismo ha situado el foco sobre la familia propietaria, ya señalada por la comunidad por problemas previos respecto al uso del agua común y el mantenimiento de las instalaciones.

En este escenario, distintos vecinos decidían este martes tomarse la justicia por su mano retirando las flores y setos que la familia señalada había plantado sin consulta previa en una parte del cementerio.

Por el momento, apuntan desde la Guardia Civil, «no hay denuncia por ninguna de las dos partes» y las labores de los agentes se han limitado a la «comprobación y seguimiento» de los hechos. Desde la Benemérita recuerdan que no hay certezas sobre la «autoría exacta» de los hechos e informan de que mantendrán la vigilancia.