VIOLENCIA DE GÉNERO

Rescatan a una joven de un zulo donde su novio la encerró «para castigarla»

La chica agredió al agente que la auxilió para evitar que detuviesen a su agresor

La chica estaba en un zulo que no se podía abrir por fuera MUÑIZ | Vídeo: Una joven es encerrada del zulo donde la encerraba su pareja

P. Abet

El maltrato llevado al límite, hasta anular la voluntad de la víctima . Eso fue lo que se encontraron los agentes de la Policía Local de O Porriño que el pasado fin de semana acudieron a una llamada por presuntos malos tratos en una vivienda de la localidad. Al personarse en la casa —que llevaban tiempo vigilando al sospechar que en ella se vendía hachís a chicos de la zona— los efectivos se encontraron con un joven de 19 años que dijo estar solo en el inmueble. La patrulla no lo creyó y registró la casa hasta que en una suerte de zulo, que solo se podía abrir desde fuera , encontraron a una chica de 20 años. Tras sacarla del agujero, como los propios agentes describieron el habitáculo, la muchacha reconoció que su novio la encerraba a veces ahí «para castigarla» . Pero, de forma inesperada, la víctima se encaró con el policía que la había rescatado cuando éste procedió a detener a su pareja, que además tenía una orden de alejamiento en vigor.

La respuesta de la joven fue tal que ella también acabó detenida por un delito de atentado contra la autoridad. «Sorprendentemente, la joven se puso del lado de su agresor intentando que no fuera arrestado , teniendo que ser sujeta por los agentes. Finalmente, logró soltarse y agredió a uno de los policías, por lo que fue detenida», explicó el jefe de la Policía Local de O Porriño, Daniel Rodríguez. En el lugar de las detenciones la Policía Local halló, además, diez dosis de hachís preparadas para su venta al por menor, según concretaron fuentes de la Policía Local. Los detenidos fueron puestos a disposición del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 3 de O Porriño, que tiene competencias compartidas de violencia sobre la mujer.

El joven fue enviado a la prisión pontevedresa de A Lama, mientras que la chica quedó en libertad con cargos y la obligación de presentarse cada semana en el juzgado. Más allá de la versión aportada por los implicados, y de que la propia víctima reconociese como práctica habitual esta clase de encierro, un tercero reveló a los agentes cómo se habían producido los hechos . Atendiendo a este testigo, tras una discusión el detenido habría introducido a la muchacha en el agujero, del que solo se podía salir si alguien lo abría desde el exterior, porque desde dentro no había ningún tipo de cerradura. Se desconoce el tiempo que la joven pasó en el zulo ni las veces que había sido sometida a este tipo de «castigo». Al margen del delito de malos tratos, con estos arrestos la Policía Local también dio por desmantelado un punto de venta de droga en la parroquia de Cans, donde está situada la vivienda.

Mismo modus operandi

El caso de O Porriño recuerda, por su tipología, a otra reciente agresión en la que la víctima fue descubierta por los agentes en un pequeño armario de la casa del que tampoco tenía forma de salir . En este caso, ocurrido en Murcia, la mujer también negó los hechos y defendió a su marido asegurando que los rasguños que presentaba en el rostro se los había causado ella misma durante un ataque de nervios. Fue su hijo pequeño, de solo seis años, el que confesó a los policías que llegaron a la casa que el hombre había pegado a su madre y la había cerrado en el armario. Según el testimonio del pequeño, su madre se había desmayado después de la paliza y su padre le había arrojado un cubo de agua para despertarla.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación