POLÍTICA

Feijóo achaca al plan electoral de Sánchez el «desprecio» de Moncloa a Galicia

Pedro Duque tampoco incluyó en su agenda a la Xunta, que ve una «estrategia premeditada»

Pedro Duque, este jueves durante su visita a Vigo EP

Pablo Pazos

La visita de Pedro Duque este jueves a Vigo ha colmado la paciencia de la Xunta. El ministro en funciones de Ciencia, Innovación y Universidades acudió a la ciudad olívica con una agenda que incluyó un encuentro con el líder del PSdeG, Gonzalo Caballero, y otro con su tío y alcalde de la ciudad olívica, el también socialista Abel Caballero. Entre medias, un periplo por el buque «Sarmiento de Gamboa». Ni atisbo de reunión con representante alguno de la Xunta ni la menor intención de celebrarla . Ni siquiera la cortesía de avisar de su paso por la Comunidad. Un «modus operandi» idéntico al del pasado lunes de su colega Reyes Maroto, titular de Industria.

«Lamentablemente hoy constatamos que ese error [de Maroto] no fue una casualidad. Hay una estrategia premeditada (...) de aislar a la Xunta de Galicia y a los propios gallegos», denunció primero el conselleiro de Economía, Emprego e Industria, Francisco Conde, desde Nigrán. Una «falta de respeto institucional, evidente y muy difícil de entender», a ojos del vicepresidente Alfonso Rueda, quien desde Pereiro de Aguiar (Orense) censuraba que, si bien no hay Gobierno, sí abunda la «propaganda del PSOE».

Y aún faltaba por pronunciarse Alberto Núñez Feijóo. El presidente de la Xunta fue inquirido en Baiona por el panorama político nacional y su lectura fue rotunda: «Todo indica que estamos ya iniciando la campaña electoral». Una reflexión derivada de la actitud de los dos últimos ministros que han pasado por Galicia. La Administración autonómica se enteró por los medios de comunicación; no hubo siquiera comunicación a través de la Delegación del Gobierno; su actividad se volcó con miembros de su partido, el PSOE. « Eso solamente se hace en campaña electoral », resolvió Feijóo.

«Solo así se explica que los ministros visiten las comunidades autónomas y muestren un enorme desprecio hacia las instituciones democráticas , que son los Gobiernos autonómicos, el Parlamento autonómico y el presidente autonómico», apuntó, para recordar que Maroto llegó al extremo de no celebrar un encuentro con él y «al día siguiente» hacerlo con el presidente asturiano, el socialista Adrián Barbón, «para tratar de la misma empresa, Alcoa»; y que, en el caso de Duque, el buque donde se explayó en explicaciones bajo el seguimiento de los medios, el «Sarmiento de Gamboa», está «cofinanciado por la Xunta».

Candidatos del PSOE

«Hemos comprobado que los ministros ya no pertenecen a un Gobierno», incidió Feijóo. « Los ministros vienen como candidatos del PSOE para las próximas elecciones generales, que todo parece indicar que vamos a tener que volver a sufrir en el mes de noviembre. Este es el guion. Llevamos un año de campaña electoral y ahora nos amenazan con tener otro año más, y hasta finales de este año saber quién puede gobernar nuestro país».

Un hecho «absolutamente atípico» achacable, cree Feijóo, a la «vanidad» de Pedro Sánchez, de quien aseguró que «no quiere la abstención del PP» ante una eventual nueva investidura, sino «hacer responsables a todos los partidos políticos del bloqueo» que sufre España. Mientras, se dedica a «construir un relato» donde los culpables son los demás, para «justificar unas segundas elecciones». De ahí los desaires de los ministros: «No hay ningún Gobierno que se tome en serio la gobernabilidad de España que no cuente con otro gobierno del Estado, que es una comunidad autónoma». Salvo en campaña.

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