Castellón

En imágenes: miles de castellonenses se encaminan a la Magdalena pese a que amenaza lluvia

La «Romeria de Les Canyes» supone la jornada más importante de las fiestas en las que la provincia rinde homenaje a su capital y recuerda su historia y su mitología

Imagen de la Romeria de Les Canyes de Castellón EFE

ABC

Con el cielo cubierto de nubes y una probabilidad de precipitación del 75 % a partir de mediodía, miles de castellonenses se dirigen a la ermita de la Magdalena y el Castell Vell portando la caña y la cinta verde para rememorar la fundación de la ciudad de Castellón de la Plana pese a la amenaza de lluvia.

La Romeria de Les Canyes supone la jornada más importante de las Fiestas de la Magdalena, tras el arranque de fiestas del sábado cuando la provincia rinde homenaje a su capital y recuerda su historia y su mitología. Los castellonenses han ido llenando la Plaza Mayor para hacerse con una de las 28.000 cañas que ha repartido el Ayuntamiento.

Ximo Puig, Amparo Marco y Vicent Marzà, en la Romeria EFE

Antes de salir hacia la ermita de la Magdalena, la alcaldesa de Castellón, Amparo Marco ha afirmado que "ja el dia es arribat" (ya el día ha llegado), de la Romeria en el que "toda la gente de Castellón y todos los visitantes podrán ver nuestro Castell Vell reconstruido".

Marco ha deseado a todo el mundo que "pase unas muy buenas fiestas de la Magdalena, en convivencia, alegría y felicidad".

"9 días para apartar los problemas y vivir en la calle en una ciudad tan mediterránea, magnífica y preciosa", ha explicado Amparo Marco y ha dado la bienvenida "a todos los que han venido de fuera".

Romeria de les Canyes de la Magdalena EFE

A las 6.30 horas ha sido la campana Vicente con su volteo la encargada de marcar el inicio de la jornada festiva, a la que ha seguido la "despertá" de la pirotecnia Peñarroja.

Las cañas rematadas con la cinta verde han ido poniendo el punto de color a la larga jornada festiva castellonense y han acompañado a sus dueños junto a la tradicional "barreja" y las "figas albardaes" antes de salir hacia la ermita de la Magdalena.

Antes de las 8 horas la comitiva oficial se ha concentrado en el Ayuntamiento para, después de la misa de romeros en la Concatedral de Santa María, iniciar la marcha para dejar atrás la ciudad de Castellón en dirección a la ermita de Sant Roc de Canet.

Vicent Marzà, conseller de Educació, en la Romería de Les Canyes de la Magdalena EFE

El presidente de la Generalitat, Ximo Puig , ha participado en la Romeria acompañado por Marco y el resto de la corporación municipal.

También ha participado en la marcha el conseller de Educación, Investigación, Cultura y Deporte, Vicent Marzà , la presidenta del PPCV, Isabel Bonig , el delegado del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Juan Carlos Moragues y el presidente de la Diputación de Castellón, Javier Moliner .

Las reinas de las fiestas, Carla Bernat y Lucía Burguete, junto a sus damas, han encabezado la comitiva que pronto llegaba a Sant Roc de Canet para almorzar el tradicional "figa y doset".

Imagen general de las personas camino a la ermita en la romería de Les Canyes EFE

La marcha continúa y a partir del mediodía comienza a llegar a la ermita de la Magdalena, donde se desarrolla la comida, que normalmente suele estar compuesta por una tortilla de habas o por un plato de paella, ofrecido por el Ayuntamiento de la ciudad, que cocina una gigante.

Cada año más castellonenses se animan a realizar el camino de vuelta a pie, conocido como la "torná" ya que en realidad, es la verdadera esencia de la fundación de la ciudad, y se dirigen por la antigua vía romana del Caminás hasta la basílica de la Virgen del Lledó porque, como manda la tradición: "Si vas a la Magdalena y no paras en Lledó, no puedes decir con la boca llena que eres hijo de Castellón".

Durante la "torná" se efectúan varias paradas en las que se cantan antiguos gozos, y posteriormente la jornada festiva de hoy, conocida como "Magdalena, festa plena", culmina por la noche con el desfile de las "gaiatas".

Según la leyenda, en 1251, los antepasados de los castellonenses se desplazaron de la montaña a la tierra de la plana, la bajada a la llanura se prolongó y la noche y el mal tiempo les sorprendió.

Las tierras se convirtieron en fangosas, por lo que decidieron atar un candil en el extremo de cada cayado para alumbrar el camino por el que pasaban y los niños llevaban un pan cocido en forma de rollo a modo de collar.

Son los elementos que han dado origen a los símbolos de las fiestas de la Magdalena: la caña, el rollo y la "gaiata", monumento dominado por la luz y el color que recuerda los faroles utilizados en ese primer descenso.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación