La Generalitat prepara una ley para retirar símbolos franquistas sin el acuerdo de los ayuntamientos

El Gobierno catalán quiere que la memoria histórica forme parte del currículum educativo de las escuelas de la comunidad

Retirada de un monumento a Jose Antonio Primo de Rivera en Barcelona EFE

Miquel Vera

La Generalitat de Cataluña prepara una nueva ley de «memoria histórica» que le permita retirar monumentos y simbología franquista de las calles de la comunidad sin contar con el beneplácito de los ayuntamientos de las localidades afectadas. «Es ahora o nunca», ha asegurado hoy la consejera de Justicia, la republicana Ester Capella, al anunciar la medida en el Parlamento de Cataluña.

El objetivo del Gobierno catalán es unificar todas las normas sobre «memoria democrática» en una nueva ley integral que facultará al Ejecutivo autonómico para retirar la «simbología franquista» de los espacios públicos de Cataluña, anular condecoraciones y suprimir los nombres de calles en homenaje a personajes vinculados con dictaduras y crímenes de lesa humanidad.

«Cerrar heridas»

«Si no nos damos prisa, ya no estaremos a tiempo. La nueva ley de memoria será una herramienta para cerrar heridas y acabar con el duelo», ha explicado Capella este miércoles en la Comisión de Justicia del Parlament . Con su propuesta, el Govern trata de centrar la atención del soberanismo catalán en cuestiones que lo aglutinan más allá del «procés» y la lucha contra la herencia franquista es una de ellas.

La consejera de Justicia ha asegurado que no se podrá dejar atrás los traumas de la dictadura mientras en las calles de la comunidad haya símbolos que, a su parecer, humillan «a los perdedores de la Guerra Civil y a las víctimas del franquismo». No en vano, la Generalitat advierte de que cada vez quedan menos víctimas y testigos de la dictadura y apunta que se está ante «la última» oportunidad para reparar a las víctimas y reconstruir los hechos «de forma fidedigna».

La consejera de Justicia en el Parlament GENERALITAT DE CATALUNYA

Las escuelas y la memoria

La educación también será otro de los pilares de la nueva ley catalana de memoria democrática, para ello, se trabajará para incorporar esta cuestión al currículo educativo . Asimismo, se pretende ofrecer formación específica a los docentes que den clases vinculadas a esta materia. Sin embargo, Capella no ha dado más detalles sobre una cuestión delicada en un momento en el que el sistema educativo catalán es señalado por presuntos casos de adoctrinamiento en las aulas.

Paralelamente, el Gobierno catalán ha planteado la puesta en marcha de una «Comisión de la Verdad» que estudie y cuantifique los crímenes cometidos desde el inicio de la Guerra Civil hasta la Transición. Asimismo, hoy se ha avanzado que la nueva ley tendrá un enfoque de género y hará énfasis en el reconocimiento de colectivos como las mujeres, las personas LGTBI o los bebés robados , que han sido «especialmente castigados y olvidados».

500 fosas

Según la Generalitat, en Cataluña hay más de 500 fosas con desaparecidos de la Guerra Civil y el franquismo. Así las cosas, el Ejecutivo autonómico trabaja con un «plan de apertura» para analizar los restos, devolverlos a sus familiares y garantizar una «sepultura digna» . Por otra parte, cifra en 66.590 las personas contra las que se instruyeron procedimientos judiciales militares por causas «políticas» durante la dictadura.

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