Barcelona elimina la Reina Regente del salón de plenos con el apoyo del PSC

Tal y como se preveía, el Ayuntamiento de Barcelona ha aprobado este miércoles cambiar el nombre del salón de plenos de la Reina Regente por el de Carles Pi i Sunyer, en homenaje al alcalde republicano que la capital catalana tuvo en 1934 y 1937. El rebautizo de nombre deberá ratificarse en el pleno de este mes con el apoyo de dos tercios de los ediles.

La medida, que se ha votado en la comisión de Presidencia, ha sido apoyada por BComú, PSC, CiU, ERC y la CUP y, por el contrario, ha sido rechazada por los grupos municipales de C's y PP, sumando 33 ediles a favor y ocho en contra.

La propuesta, enmarcada dentro de los planes de Ada Colau por cambiar los símbolos monárquicos en el Ayuntamiento

, incluye que la sala cuente con una representación simbólica alusiva de Pi i Sunyer que responda a la singularidad histórica y de capitalidad de Barcelona y a los principios democráticos, de neutralidad religiosa y de catalanidad, y encargar a los servicios técnicos redactar un proyecto para reformar la sala para "corregir sus carencias actuales".

El comisionado de Memoria Histórica, Ricard Vinyes, ha defendido la figura de Pi i Sunyer por su papel "en esta ciudad, en este país y también en el Estado español", ya que, además de alcalde, fue ministro durante la República y consejero de la Generalitat hasta el final de la Guerra Civil. Según Vinyes, Pi i Sunyer es una figura neutral.

El PSC vota a favor

Desde el PSC, la edil Carmen Andrés ha defendido la medida y ha alegado que Pi i Sunyer fue alcalde de todos. "No estamos faltando a la historia ni a la memoria de la ciudad, sino que el cambio responde a lo que aprobamos hace pocos meses", ha apuntado recordando el cambio en el reglamento orgánico municipal.

Por su lado, el portavoz de CiU, Joaquim Forn, ha abogado por el homenaje al exalcalde republicano "porque reúne los valores democráticos y de catalanidad que son los que inspiran Barcelona". En una línea similar, el republicano Jordi Coronas ha comentado que, Pi i Sunyer aunque tenga carga ideológica, "hay personas que, más allá de las siglas, hacen cosas relevantes", y ha apostado por seguir cambiando nombres de simbología monárquica y por construir un nuevo Estado para erradicar la monarquía de Cataluña, en sus palabras.

Además, Josep Garganté (CUP) ha apoyado la propuesta y ha defendido más cambios en las calles con nomenclatura monárquica, con tal de "enterrar simbólicamente la memoria de la monarquía borbónica" y un estamento impuesto por la sangre y el fuego y restaurado por la dictadura franquista, según él.

Críticas de C's y PP

Por el contrario, el portavoz de C's, Paco Sierra, ha lamentado que la figura de Pi i Sunyer no es neutral y que el cambio "responde a la entrega de Colau al independentismo y a ERC, después de su asistencia independentista a la manifestación del 11 de septiembre" en la Diada. Además, ha criticado que Pi i Sunyer muy poco tiempo, por lo que rechaza que sea un referente.

Además, la concejal popular Àngels Esteller ha recordado que Pi i Sunyer cuenta con una elevada carga política aunque el Gobierno municipal quiera disfrazarlo y ha denunciado de que el gobierno de Ada Colau pretende aniquilar lo que representa la monarquía y que alaba la República cuando fue "uno de los periodos más oscuros" de la historia española.