Barcelona con la Selección ya espera los octavos para recuperar la pantalla gigante

La plataforma negocia con el Ayuntamiento para ampliar el aforo tras el éxito ante Portugal

Aficionados de la selección, el pasado 15 de junio, durante la retransmisión del España-Portugal INÉS BAUCELLS

Sergi Font

Los seguidores de la selección española en Barcelona ya esperan los octavos de final para volver a reunirse ante una pantalla gigante y animar a La Roja. Nadie imagina una derrota ante Marruecos esta noche y mucho menos que los de Fernando Hierro queden apeados en esta fase de grupos, en la que ya suman cuatro puntos tras el empate con Portugal y la victoria ante Irán. La plataforma Barcelona con la Selección ya trabaja con el Ayuntamiento para tratar de conseguir los permisos necesarios para romper la traba del aforo limitado.

La experiencia del primer partido de la selección les avala. «El pasado viernes unas 4.000 personas aproximadamente se acercaron hasta las puertas del Camp del Águila para ver el partido inaugural del Mundial para La Roja, entre Portugal y España en pantalla gigante. La pena es que, por el aforo impuesto por el Ayuntamiento, únicamente 1.500 pudieron acceder al recinto. Como pasa habitualmente, cada vez que algo lleva la marca de la selección española los barceloneses se vuelcan con el acontecimiento. Y a falta de 15 minutos para el inicio del encuentro, nos vimos obligados a cerrar el acceso por el aforo otorgado por el Ayuntamiento», explican desde la plataforma.

Esto provocó que todos aquellos que no pudieron acceder al recinto se ubicaran sobre las gradas, en el exterior del estadio, desde donde se podía ver también la pantalla gigante. Sin ningún incidente acontecido, el acto fue un éxito total y una auténtica fiesta del deporte español en la Ciudad Condal. «Finalmente, España no salió con victoria, Barcelona sí. Todos aquellos a los que les gusta disfrutar de La Roja, por fin pudieron hacerlo y, por supuesto, sin ningún tipo de altercado», destacan desde Barcelona con la Selección. El hecho de que los dos siguientes partidos se disputaran entre semana y ante rivales poco atractivos, aconsejó interrumpir las emisiones hasta los octavos de final, lo que además da margen al grupo para entablar conversaciones con el Ayuntamiento de Ada Colau, que durante su mandato siempre ha puesto trabas a este tipo de celebraciones.

Negociación con Colau

«En octavos, probablemente ante Rusia o Uruguay, volveremos a organizar el mismo evento pero mejorado. El Ayuntamiento nos exigió más de lo habitual y nosotros cumplimos. Ahora nos toca a nosotros exigir mejores condiciones. Por lo tanto, sólo queda sentarnos con el Ayuntamiento y ampliar el aforo del emplazamiento, aprovechando el césped del mismo.

Una solución muy sencilla que esperamos poder hacer efectiva el próximo partido», avisan desde la plataforma organizadora. E insisten en la inexistencia de incidentes, antes de lanzar un mensaje final: «Solo nos queda evitar una imagen: la de un niño enfadado por no poder entrar al recinto por culpa de tener un aforo tan limitado. Pondremos todo el empeño para que nadie se quede fuera del estadio. Esperamos que el Ayuntamiento lo permita».

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