ELECCIONES 26-M

Tudanca promete un Gobierno «de centro» y disparar el gasto público

Anuncia una vicepresidencia sobre el Reto Demográfico si logra llegar a la Junta

Tudanca, durante la presentación de su programa electoral en Valladolid Ical

J. M. AYALA

Sin pronunciar el término «izquierda» durante su media hora de intervención como muestra de la estrategia de moderación emprendida desde hace unos meses para captar votos descontentos del PP -una vez que ya creen recuperados buena parte de los que se fueron a Podemos-, el candidato del PSOE a la Junta, Luis Tudanca, desgranó este sábado buena parte de sus cien medidas «ambiciosas y coherentes» presentes en su programa con el que persigue intentar formar «un Gobierno de centro» en Castilla y León.

Rodeado por un nutrido grupo de candidatos municipales y autonómico y de representantes de distintos colectivos sociales, a los que agradeció haber aprendido de ellos, y con las Cortes de fondo, el líder socialista -sin el acompañamiento de ningún elemento que recordara al PSOE y sí a su persona- comprometió «otra forma» de dirigir la Comunidad con más «decencia y transparencia». El burgalés quiere así llevar a la Comunidad y a sus ciudadanos «más allá» y a «dejar ser los campeones de la España vaciada» tras los errores del PP, al que apenas citó durante su alocución.

Con un aumento evidente del gasto público en forma de planes, becas, ayudas, bonificaciones y demás iniciativas y sin que ayer detallara como recaudará más dinero en la región para afrontarlo, Tudanca fijó en la lucha contra la despoblación, para la que «no hay recetas mágicas», el «principio rector» de sus políticas. Anunció así la creación de una Vicepresidencia para el Reto Demográfico para coordinar esta materia con el resto de administraciones y organismos implicados. Un plan de retorno con subvenciones de hasta 3.000 euros o la cobertura universal de acceso a internet fueron otras propuestas en este capítulo, además de la aprobación de varias leyes -prometió más de una docena- como una nueva de Caza. Insistió en blindar en el Estatuto un «suelo social» de inversión equivalente, al menos al 12% del PIB para evitar «tocar» el estado del bienestar.

En materia de servicios públicos, tras reconocer que «tenemos una gran sanidad», apostó por «relanzar» la Atención Primaria mediante el incremento de los recursos presupuestarios y prometió reducir las listas de espera. En educación, y sin desglosar su coste, garantizará por ley la gratuidad de los libros de texto en la educación obligatoria, el blindaje de las tasas universitarias, la apertura de comedores escolares en verano y el aumento de las becas autonómicas.

Tampoco hizo cuentas respecto a las medidas para combatir la desigualdad, donde ampliará la teleasistencia, creará 2.000 nuevas plazas residenciales para dependientes y promocionará un parque público de viviendas colaborativas y otro de alquiler social, entre otras.

En políticas económicas, se contemplan bonificaciones fiscales para autónomos, bonos-empleo para incentivar el empleo, un fondo agrario ante problemas climatológicos e incrementar la inversión en I+D+i, además de un plan de reindustrialización con las empresas eléctricas que abandonen el consumo del carbón

Entre las propuestas para los funcionarios, citó la aprobación de un nuevo catálogo de puestos de trabajo «negociado» y la recuperación de la jornada de 35 horas semanales.

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