Elecciones municipales

Óscar Puente intentará un gobierno en solitario en el Ayuntamiento de Valladolid

El candidato socialista a la Alcaldía dará prioridad como socio a Toma la Palabra aunque no cierra ninguna puerta

El candidato socialista a la Alcaldía de Valladolid, Óscar Puente, durante la rueda de prensa F. HERAS

ABC

El alcalde en funciones de Valladolid y candidato del PSOE a la reelección, Óscar Puente, anunció hoy su intención de gobernar en solitario en el próximo mandato municipal, por liderar la lista más votada en las elecciones del pasado 26 de mayo. Esta decisión se produce ante la pérdida de confianza con Valladolid Toma la Palabra, su socio en este mandato, si bien tendrá “prioridad” en la búsqueda de acuerdos.

Óscar Puente compareció este lunes en el Salón de Recepciones del Ayuntamiento de Valladolid para informar sobre su decisión ante la celebración este sábado, 15 de junio, de la sesión de constitución del Consistorio, donde el PSOE contará con once ediles, como primera fuerza política, frente a los nueve del PP, los tres de Ciudadanos, los tres de Toma la Palabra y el representante de Vox.

En ese sentido, el regidor socialista aseguró que intentará liderar un gobierno en solitario con el «respeto a los principios» que han guiado la acción del equipo municipal durante los últimos cuatro años y con el objetivo de mejorar la gestión. Así, admitió que el PSOE tendrá que afrontar la búsqueda «permanente» del acuerdo, para lo que no cerró «ninguna puerta» en el arco municipal de Valladolid.

«La situación no ha puesto ante esta disyuntiva», afirmó Óscar Puente quien sin embargo no descartó la posibilidad de alcanzar algún tipo de pacto con Toma la Palabra, con quien había cerrado un principio de acuerdo, pero ante la suspensión de la consulta al censo de esta candidatura, el PSOE decidió romper la negociación y apostar por un gobierno en solitario.

«El tiempo marcará si es posible recuperar la confianza», afirmó Óscar Puente quien argumentó que existe «desconfianza» por parte de sus socios que impiden compartir el gobierno del Ayuntamiento de Valladolid. Aseguró que los miembros de Toma la Palabra cambiaron por una encuesta su actitud de colaboración por la de la «confrontación».

Pulsión «cainita» y «destructiva»

Aseguró que falta confianza mutua y añadió que Toma la Palabra tiene «recelo» y «complejo de superioridad», al atribuirse los logros del equipo de gobierno. Además, apuntó que esta candidatura presenta como una parte de la izquierda una pulsión «cainita» y «destructiva». También le afeó su falta de «generosidad» y altura de miras para reeditar un acuerdo en el Ayuntamiento vallisoletano.

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