La Junta alerta del aumento del riesgo de incendios por la ola de calor
El Ejecutivo recuerda la prohibición de realizar quemas de cualqueir tipo en el medio rural
La Junta de Castilla y León ha alertado este martes de que la ola de calor prevista para los últimos días de junio elevan el riesgo de incendios forestales y agrícolas en esta Comunidad, aunque la época de «peligro alto» se mantiene para el próximo 1 de julio, cuando los equipos de extinción ya estarán al máximo anunciado.
Se trata de los 4.544 trabajadores que ha anunciado como integrantes del dispositivo contra incendios el consejero de Fomento y Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones , según ha explicado su departamento en un comunicado.
Desde el 21 de junio la Junta ha declarado peligro medio en toda la Comunidad y ha dotado al operativo de medios humanos y materiales adecuados para esta situación, que se incrementarán desde este miércoles por la ola de calor, hasta sumar el 82 por ciento del total previsto para el momento más peligroso.
La Junta ha destacado en su comunicado que «el elevado déficit hídrico, que alcanza algo más del 30% en nuestra comunidad, aunque paliado por las lluvias de las pasadas jornadas en el oeste de la Comunidad, ha provocado un agostamiento de la vegetación herbácea así como un adelanto en la recogida de las cosechas», informa Efe.
La previsión de elevadas temperaturas, acompañadas de fuertes vientos locales, previstas para estos últimos días de junio, donde se pueden alcanzar valores muy elevados inusuales para esta época del año, elevan el riesgo de inicio de incendios, forestales y agrícolas, y favorecen su propagación rápida en caso de iniciarse, ha añadido la Junta.
Por ello, la Consejería de Fomento y Medioambiente ha pedido a los ciudadanos que extremen la precaución en sus labores en el medio rural, especialmente cuando se desarrollen labores agrícolas y forestales.
De hecho, la Junta ha pedido a los agricultores que eviten las horas de mayor concentración de calor y de viento para realizar sus labores de cosecha y recolección del cereal, además de disponer de medios adecuados para poder sofocar las llamas en caso de accidente.
Además, la Administración ha recordado que existe prohibición de realizar quemas de cualquier tipo en el medio natural y es necesario adoptar las medidas preventivas cuando se realice cualquier actividad que de forma indirecta pueda ocasionar un incendio.
