Gastronomía

¿Qué entiende un noruego por una tapa?

El chef Concurso Mundial reúne en Valladolid las interpretaciones de chefs internacionales del concepto español de pinchos

El chef Oyvindb Boe Dalev se ha alzado este miércoles con el título de vencedor del primer Mundial de la cocina en miniatura F. HERAS

MARÍA GAJATE

Era la primera edición y el jurado no sabía muy bien a qué se enfrentaba. El título sonaba bien: Concurso Mundial de Tapas , pero generaba mucha expectación. Y es que entre sus participantes había sólo un español, el resto eran chefs de distintos países del mundo en los que la gastronomía tiene que ver un poco o nada en absoluto: Bélgica, Canadá, Ecuador, Francia, India, Inglaterra, Italia, Japón, Marruecos, México, Noruega, Nueva Zelanda,Panamá, Perú y Estados Unidos «¿Cómo interpretarán un concepto tan nuestro?» «No vale eso de hacer chiquitito un plato grande», advertía el responsable del jurado, el popular chef Alberto Chicote , antes de que arrancara el certamen. El resultado ha sido una sorpresa grata y particular en la que se ha podido ver un sello internacional plasmado en la joya de la corona de los fogones nacionales: los pinchos. De hecho, ha ganado un foráneo, el representante de Noruega. El participante de casa, Alberto Montes, del Hotel Restaurante Atrio, en Cáceres, ha sido subcampeón.

¿Qué entiende un noruego por tapa? Pues en este caso, el chef Oyvindb Boe Dalev se ha alzado este miércoles con el título de vencedor del primer Mundial de la cocina en miniatura con un «Bacalao Noruego en crujiente de alcachofas de Jerusalem con algas».

«Bacalao Noruego en crujiente de alcachofas de Jerusalem con algas», tapa ganadora del Concurso Mundial celebrado en Valladolid

Curiosamente la tapa más tradicional del concurso ha llegado desde Marrakech. La cocinera Fátima Namili de Dar Moha ha llevado este título a Marruecos por su creación «Pastilla» cuyos ingredientes protagonistas eran la cordorniz, el hojaldre y las almendras.

La Tapa más Vanguardist a ha corrido a cargo de Francesco de Sanctis, de Sibaris Cocina Libre, de Perú, que se ha llevado a su terreno el concepto de pincho a través de un único ingrediente principal, la quinoa aderezada con múltiples ingredientes y dotada de colorido.

El mejor concepto de tapa lo ha logrado plasmar el belga Jonathan Grandy, de Heliport Brasserie , por su propuesta «Carpaccio de gambas rojas de Garrucha».

Otros países no ganadores también han traído propuestas interesantes al certamen. Desde la India ha concursado una adaptación del «puchka», que es uno de los más populares sanck a degustar en puestos en la calle en este país y que bien podría servir de tapa; Inglaterrra ha concursado con una propuesta «ibérica» con trampantojo incluido en el que pese a las apariencias no hay rastro de jamón; y Panamá se ha atrevido a cocinar ingredientes muy típicos de España en su «festín del chipirón», que combinaba calamar con queso manchego y chorizo, entre otros.

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