El banco de la amistad: la propuesta de una escolar de Burgos que se hizo viral, ya es realidad

Todo comenzó cuando el profesor Alberto Cotillas de cuarto de Primaria del colegio público Fernando de Rojas de Burgos, este curso ya jubilado, sugirió a sus alumnos que crearan un proyecto. Entonces, la protagonista de esta historia, la burgalesa Haizea Cozar, escogió el tema del bullying y comenzó a investigar. Así, se topó con la historia de la niña Acacia Woodley, que ideó un banco de la amistad para acabar con las disputas en su colegio, un centro de Estados Unidos. ¿Y por qué no trasladar esta propuesta a su colegio burgalés?, pensó Haizea.

Dicho y hecho. al final del pasado curso escribió una carta a la directora con esta sugerencia, recuerda ahora la directora Ana María Martínez. «Hola Ana, me gustaría que haya un banco de la amistad en el patio. Tiene que ser de colorines y un cartel que ponga 'banco de la amistad' para quien se sienta solo siente y alguien que le vea sentado le pregunte: ¿Quieres jugar conmigo?». A Silvia Velasco, una ayudante técnico educativo que se incorporó este curso -el centro dispone de un plan de atención a la diversidad- le pareció tan brillante la idea que decidió colgar la carta en su red social Facebook, y el resto ya es historia.

En pocos días la idea de Haizea se ha hecho viral en las redes sociales. Fueron miles de personas a las que alcanzó esta historia -incluso a la propia madre de la alumna, que al enseñarselo a su hija descubrió que era la pequeña quien había escrito la carta. Esta misma semana el colegio burgalés hacía realidad la propuesta de esta niña, ahora ya en quinto de Primaria. «Como la carta me llegó a final del curso pasado decidimos que era mejor ponerla en práctica ya en septiembre», señala Ana María Martínez, directora de este centro de Educación Infantil y Primaria, uno de los más grandes de la comunidad autónoma, con casi 1.200 alumnos, que precisamente este curso celebra su 40 aniversario.

La directora enmarca la iniciativa dentro del Plan de Convivencia del colegio, explica Ana María Martínez, recordando que la Consejería de Educación de Castilla y León fue pionera a la hora de animar a los colegios a contar con este tipo de iniciativas contra el «bullying».

Ha sido tal la aceptación de este banco -la propia Haizea ha ayudado a ponerlo en práctica y es su escritura la que figura en él- que ahora mismo es la atracción del patio, confiesa Ana María Martínez. Y no sólo eso, ya son varios los centros educativos los que se han interesado por ello, nos cuenta su directora, quien presume también del ambiente de este colegio acostumbrado a la diversidad -a él acuden también niños con discapacidad física e intelectual- y dice sentirse «orgullosa» de la convivencia que día a día hay en el centro.