El hospital de Toledo incorpora una nueva técnica para tratar las tendinitis
Las ondas acústicas de alta energía son capaces de estimular la reparación de los tejidos, mejorar el aporte sanguíneo y desintegrar depósitos de calcio
El hospital de Toledo ha incorporado una n ueva técnica mínimamente invasiva para el tratamiento de las tendinopatías que evitará el desplazamiento de los pacientes a otros hospitales de la región.
La Consejería de Sanidad ha explicado en un comunicado que esta nueva implantación amplia la cartera del servicio de Rehabilitación del Complejo Hospitalario de Toledo, dependiente del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha .
La doctora Angustias Marquina , jefa de servicio de Rehabilitación del Hospital de Toledo, ha indicado que este procedimiento va a incorporar a las consultas a especialistas de las ondas de choque focales para el manejo de diferentes tendinopatías crónicas como las tendinitis calcificantes del hombro, las epicondilitis o la fascitis plantar, entre otras patologías del aparato músculoesquelético.
La tendinitis es la inflamación del tendón que provoca dolor y molestias alrededor de la articulación en la que se produce, puede afectar a cualquier tendón del cuerpo, en especial alrededor del hombro, el codo, la rodilla y el talón, y puede estar causada por lesiones deportivas, posturas incorrectas o sobrecargas mecánicas.
Para la doctora Marquina, los resultados demuestran que los pacientes mejoran en nivel de dolor y de la función pues se trata de ondas acústicas de alta energía capaces de estimular la reparación de los tejidos, mejorar el aporte sanguíneo y desintegrar depósitos de calcio, de manera que aceleran la regeneración de las zonas inflamadas.
Según indican los médicos, los síntomas de las tendinitis suelen mejorar con el reposo y el tratamiento farmacológico pero, si el dolor persiste, es necesario utilizar diferentes modalidades de terapia física habituales en rehabilitación, de ahí la posibilidad de utilizar las ondas de choque focales cuando estas patologías se vuelven crónicas pues amplía las opciones de tratamiento y constituye un procedimiento previo a la indicación quirúrgica.
Esta nueva técnica mínimamente invasiva la realiza el facultativo del servicio de Rehabilitación en las consultas y no supera los diez minutos de tratamiento , en tres sesiones semanales.
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