Favorecer la inserción social y la autonomía personal

Una sociedad moderna y que aboga por la igualdad entre las personas, es aquella que cuida de los colectivos más vulnerables y con necesidades especiales. Protegerles y garantizarles el derecho a una vivienda digna, favorecer su inserción social y laboral es un compromiso para los Gobiernos en los próximos años.

Consciente de este compromiso, el Gobierno de Castilla-La Mancha ha puesto en marcha una ley de garantías de las personas con discapacidad que, entre otras cuestiones, aboga por defender la igualdad y mejorar la calidad de vida de este colectivo y sus familias, de acuerdo con lo que establece la legislación nacional y la Convención Internacional de Derechos de las Personas con Discapacidad.

En este contexto, la Junta considera que uno de los derechos de las personas con discapacidad es poder vivir de forma independiente.

Para garantizarlo, la región dispone de red de 521 plazas dirigidas a personas con discapacidad intelectual. Estas plazas se distribuyen en 79 viviendas tuteladas y viviendas de autonomía, tanto propias como concertadas con entidades locales y entidades privadas de iniciativa social, en las cinco provincias. Además, para las personas con discapacidad física, la red dispone de dos viviendas adaptadas con nueve plazas completamente accesibles.

Un ejemplo de estas viviendas, que buscan garantizar el derecho a vivir de forma autónoma de las personas con discapacidad intelectual, es la que gestiona la Asociación Comarcal «Prodiscapacidad» en La Solana, donde residen algunos de los jóvenes que diariamente acuden al centro ocupacional que también gestiona esta entidad en Ciudad Real.

Para brindar una mejor atención, las viviendas se organizan según el nivel de autonomía de las personas que residen en ellas. Hay dispositivos con un alto nivel de supervisión por parte de los monitores y educadores, las llamadas viviendas tuteladas (24 horas de supervisión) y otras en las que residen quienes han adquirido un nivel adecuado de autonomía personal, tanto en el autocuidado y gestión de sus tareas cotidianas, como en las destrezas y habilidades necesarias para vivir de forma autónoma.

Atención especializada

Por otro lado, la región cuenta con los Centros de Día para personas con discapacidad psíquica gravemente afectados (Cadig), que son recursos sociales dirigidos a personas cuyo grado de discapacidad hace necesario un extenso nivel de apoyos, donde se les presta una atención educativa, sanitaria, de higiene y alimentaria.

El Gobierno de Castilla-La Mancha dispone de una red formada por 15 Cadig, 6 propios y 9 concertados con entidades de iniciativa social, que ofrecen un total de 804 plazas públicas de atención especializada.

El personal que trabaja en los Cadig está altamente especializado y trabaja en el desarrollo de las potencialidades de las personas con discapacidad, ya sea a través del aprendizaje de conductas básicas que quieren conseguir el mayor grado de autonomía personal e inclusión social. Además, mediante el desarrollo de programas de habilitación y rehabilitación se quiere favorecer el máximo desarrollo de sus capacidades.

Los Cadig son un servicio diurno, abierto, al que llegan diariamente usuarios que viven con sus familias o en un recurso residencial y que necesitan que se les dé respuesta a sus necesidades, ofreciéndoles una orientación activa, mediante la realización de actividades formativas, de adquisición de habilidades de autonomía personal, habilidades sociales, de rehabilitación terapéutica y de ocio.

La finalidad del Centro de Día es conseguir la instauración, reeducación y maduración de aquellas conductas que en la evaluación se hayan observado como inmaduras o deficitarias, posibilitando la mayor autonomía personal posible.

El Centro de Día presta apoyo de tipo extenso o generalizado en todas o casi todas las áreas de habilidades de adaptación (comunicación, cuidado personal, vida en el hogar, habilidades sociales, salud y seguridad y ocio), entre otros.

Entorno familiar

Por otro lado, el servicio de Centro de Día para personas con discapacidad está recogido en el artículo 10 del decreto del Catálogo de Servicios y Prestaciones a las personas con Dependencia de Castilla-La Mancha como «un recurso social destinado a favorecer la permanencia en el entorno familiar y social de las personas en situación de dependencia, que por motivo de su discapacidad física, intelectual o de cualquier otra naturaleza, tienen necesidades de apoyo de diferente intensidad y frecuencia».

Actualmente hay 2.755 personas con grado de dependencia reconocido que tienen una prestación de Centro de Día en la red regional, 78 más que el mes pasado y 600 más que en julio de 2015.

La red pública de centros de día del Gobierno de Castilla-La Mancha está formada por 55 centros con 950 plazas, distribuidos en 11 centros propios, 14 de entidades municipales y 34 privadas que tienen plazas concertadas.

Un ejemplo de este tipo de recurso social es el Centro de Día «Las Encinas» de Guadalajara, dirigido a personas mayores de 45 con discapacidad mental. Es un centro público con 33 plazas cuyas unidades de intervención se distribuyen con arreglo a la patología de los usuarios y en las que se desarrollan diferentes actividades de terapia ocupacional.

Principalmente son tareas medioambientales en las que realizan trabajos en el vivero, de horticultura, de jardinería y de limpieza en áreas exteriores, así como actividades de plástica y artísticas. Los usuarios de «Las Encinas» disponen de actividades de psicoestimulación donde participan en un programa de prevención de la dependencia y de envejecimiento activo, así como otro tipo de ejercicios.