La operativa del nuevo «macrodique» de Tenerife

Así funciona el colosal dique seco flotante que va a permitir a la isla a disponer de mayor capacidad de liderazgo para reparar buques y plataformas petrolíferas. Pesa 80.000 toneladas

R.L.P.

Un dique seco de 80.000 toneladas que ha comprado el Grupo Palumbo para sus negocios en Tenerife permitirá reparar buques y plataformas petrolíferas esta isla de forma competitiva. El astillero está ahora en fase de traslado a Canarias y estaba en venta por valor de 95 millones de dólares.

El presidente de Puertos de Tenerife, Ricardo Melchior, dijo la pasada primavera que la llegada de esta nueva infraestructura representa «un paso adelante gigantesco para nuestros puertos».

1

Se sumerge

En el transcurso de aproximadamente cinco horas y media se lleva a cabo esta operación de alto riesgo. Hay decenas de millones de euros en juego. Se hunde el dique. Un recolcador de acerca.

2

Entra el buque

El remolcador enfila la popa. Atrapa al barco que tiene como objetivo ser reparado y comienza a toda máquina a traerlo al interior.

Mientras que hay astilleros en seco en Gran Canaria, en el mar habrá una superficie que dará servicios en el dique Este del puerto de Santa Cruz de Tenerife. Se encuentra en Nueva Orleans y se instalará en las islas. Permitirá hasta construir plataformas petrolíferas. Llegó a generar empleo a 26.000 personas y estaba a la venta por 95 millones de euros.

3

Se arrastra

Se va complicando el proceso. Ni un solo milímetro de la operación es casual. Todo se ajusta como un rompecabezas. El buque se acopla cuidadosamente para que no haya desequilibrios y se transfiera la carga de forma proporcionada.

Tras muchas horas de trabajo entre las máquinas y los ingenieros, el dique seco se comienza a elevar, que es cuando comienza a verse las hélices de la nave.

4

Se vacía el dique

Sigue el vaciado y se comienza a trabajar en analizar si hay daños en la estructura por la operación. Se comienza, desde el rellano que emerge de las profundidades, a asegurar todo el perímetro. Y a explorar los pasillos que surgen debajo del barco. Es una medida de alto riesgo, como todo el proceso.

También se trabaja desde la cubierta el barco y en echar a los peces varados para que vuelvan al mar.

5

Manos a la obra

Durante al menos 40 días, hay trabajo diario muy planificado que incluye pintura del casco, soldadura y refuerzo del tanque y múltiples reparaciones. Puede surponer esos días de reparación de 6 millones de euros con 200 trabajadores.

Cuando termine todo el trabajo, se inundará el dique y el barco volverá a flotar una vez más. Cuando se haya ido, vendrá otro barco para un próximo trabajo. Una de las bondades de este sistema es que permite reparar buques en situaciones de emergencia.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación