La compleja ecuación en Canarias entre apertura de centros comerciales y cruceristas
Una encuesta de la ULPGC señala que la población percibe que «produce beneficios que van en su mayor parte a inversores foráneos»
Los cruceristas dejan poco dinero pero la burbuja del disfrute de «corredores ambientales», es decir, terrazas que indignan a los vecinos en horas nocturnas, manda más. Este mes de abril será el último hasta invierno en el que hay centros comerciales abiertos los domingos y festivos .
En centros comerciales en la órbita del Puerto de Las Palmas, el gasto se ubica en 60 euros por persona y día. El gasto medio por día y persona de un crucerista en Santa Cruz de Tenerife, según datos de la Autoridad Portuaria, se sitúa en los 51,8 euros.
Un estudio de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria señala que gracias al turismo de cruceros hay una percepción en esta ciudad de «aumento de la calidad de los restaurantes, hoteles y centros comerciales». Y añade que para los vecinos encuestados: «produce beneficios que van en su mayor parte a inversores foráneos» o «incrementa el coste de la vida».
Ruidos
El estudio «Percepción de los residentes de las Palmas de Gran Canaria ante el turismo de cruceros» afirma que la sociedad civil en esta ciudad percibe que «aumenta la contaminación del aire y del mar» aunque no define que si en esa contaminación se incluye los ruidos de terrazas y fiestas nocturnas en Vegueta.
El gobierno que resulte en ciudades, islas y región tras las elecciones de mayor deberá ordenar el periodo de compras o firmar lo que se encuentre de su antecesor. En las islas hay 49 localidades con 146 áreas de gran afluencia turística.
La mayor parte de ese turismo se dedica a visitar las ciudades y no a compras, según datos oficiales. Prefieren recorrer entornos urbanos, comprar detalles de la visita, disfrutar de playas y visitar el interior de las islas. Los que optan por comprar, lo hacen más en franquicias y tiendas de ropa que en grandes superficies alimentarias. En los cruceros hay tiendas y sistemas de baja fiscalidad.
