El Salón del Tanto Monta, la joya de Huesca que ha estado 60 años cerrada

Propios y visitantes ya pueden disfrutar, en Huesca , de la espléndida vista que ofrece el Salón del Tanto Monta . Parte de lo que fue el histórico Palacio Episcopal oscense, hoy museo de arte sacro, este emblemático salón ha permanecido sesenta años oculto, cerrado a cal y canto a la espera de una restauración que tardó décadas en llegar, que se vio frenada y entorpecida por avatares diversos, pero que al final se ha completado tras años de trabajo y una inversión millonaria.

Desde 2008 se ha estado trabajando en la restauración del Salón del Tanto Monta, que recibe su nombre del famoso lema de los Reyes Católicos que aparece grabado en su artesonado mudéjar.

Labrada en el año 1478, esta majestuosa estructrura de madera policromada se reformó en el siglo XVIII. Su valor es enorme. Su significado histórico, también.

Como explica la restauradora Ana Carrasón, que ha estado al frente del proceso de recuperación de este alfarje mudéjar, ha sido necesario un delicado, meticuloso y profundo trabajo de rehabilitación para conseguir que el artesonado volviera a tener su original esplendor en lo «estructural, funcional, de carpintería y de policromía».

Desde que comenzaron las primeras obras de restauración se han invertido un total de 1,2 millones de euros. De ellos, 900.000 los ha aportado el Estado. Los 300.000 restantes, la Comunidad autónoma. En la última fase, la que ha supuesto el grueso de la rehabilitación, se han destinado 890.843 euros, de los que más de 600.000 han sido aportados por el Gobierno central, a través del Instituto del Patrimonio Cultural Español (IPCE).

Tras unos primeros días en restringido horario abierto a las visitas, el Salón del Tanto Monta vuelve a cerrar temporalmente sus puertas para acoger los preparativos de la exposición de misales históricos con la que volverá a reabrir el 19 de diciembre. La exposición permanecerá durante dos meses.