Tribunales
Dos policías y un fiscal califican de «atentado» las convulsiones de un epiléptico
El joven enfermo será juzgado por lo penal tras ser denunciado por dos agentes que le redujeron mientras sufría un ataque
Tiene 21 años, es epiléptico diagnosticado desde hace años , esa enfermedad le hace sufrir crisis ocasionales en las que su cuerpo convulsiona de forma brusca y, ahora, uno de esos ataques le va a obligar a sentarse en el banquillo de un juzgado de lo Penal . Dos agentes de la Policía Nacional -con el respaldo de la Fiscalía- han acusado al joven de los delitos de atentado y lesiones, porque en una de esas crisis fueron golpeados por el joven mientras sufría esas convulsiones.
Los hechos ocurrieron el 7 de diciembre del año pasado en el domicilio en el que el joven vive con sus padres. Javier C. B. entró en crisis y, ante la gravedad de su estado, la familia avisó a los servicios de emergencias. Acudió al domicilio un equipo sanitario de urgencias de los bomberos de Zaragoza. Y también se personaron una pareja de agentes de la Policía Nacional para ayudar a los facultativos.
Los agentes procedieron a reducir al joven aplicando técnicas policiales, lo que después les fue recriminado por los padres del muchacho. Pero fueron los agentes los que acabaron denunciando por los golpes que habían recibido del enfermo mientras éste, en plenas convulsiones epilépticas, soltaba manotazos y patadas.
«Creíamos que el caso no iba a prosperar penalmente y que iba a ser archivado, pero no ha sido así» , ha explicado a ABC el abogado Enrique Esteban Prendas, que defiende al joven enfermo. La Fiscalía optó por respaldar la reclamación penal de los agentes y mantuvo la acusación por los delitos de atentado y lesiones , si bien los informes médicos y periciales han forzado a que le reconozca una eximente completa por enajenación . Es decir, la Fiscalía pide que sea absuelto por entender que, fruto de esa grave crisis epiléptica, el enfermo en absoluto era consciente de sus actos. Pero, pese a ello, pide que sea juzgado por delitos penales y que se le apliquen responsabilidades derivadas por ellos: someterse a un tratamiento médico durante un año e indemnizar a los agentes.
El abogado defensor considera que, en sí mismo, es «absurdo» que se le reclame penalmente que se someta a tratamiento médico, «cuando lleva tiempo en tratamiento médico por su enfermedad». Y, respecto a la indemnización, entiende que ésta podría haberse dirimido en una causa civil, sin necesidad de entrar en la jurisdicción penal.
El letrado del joven niega la mayor: no hubo delito alguno y, por tanto, no ha lugar responsabilidad penal alguna por parte de su cliente. Así lo va a defender en la vista que se celebrará en el Juzgado de lo Penal número 11 de Zaragoza en fecha aún por determinar.
«Sostenemos que nunca llegó a producirse delito porque en lo sucedido no hubo ni voluntad ni intencionalidad . Javier tenía totalmente anulada su voluntad por el ataque epiléptico que estaba sufriendo», explica el abogado. «Y si no hay delito no hay consecuencia alguna que se le pueda reclamar penalmente», subraya, al margen de que llegado el caso pudieran discutirse responsabilidades civiles.
Este letrado muestra su sorpresa por la decisión de los agentes de denunciar penalmente e indica que esa actitud contrasta con la de los sanitarios que intervinieron, que se enfrentaron al mismo cuadro y que, sin embargo, no plantearon reclamación alguna. «Hemos pedido que se les localice para que estos sanitarios testifiquen», ha indicado Enrqiue Esteban Prendas. Este abogado cree que «quizás los agentes presentaron la denuncia de forma defensiva, por si ellos eran denunciados por los padres del joven, ya que les habían recriminado cómo habían actuado para reducir al enfermo».
