Sucesos

Detenida por esparcir gas pimienta en las Urgencias de un hospital y obligar a evacuar la zona

La mujer, de 33 años, está acusada de los delitos de desórdenes públicos y lesiones. Ocurrió en el mayor hospital de Aragón

El Hospital Miguel Servet es el mayor de Aragón Fabián Simón

R. P.

La Policía Nacional ha detenido a una mujer de 33 años, a la que acusa de haber esparcido un frasco entero de gas pimienta en el servicio de Urgencias del Hospital Miguel Servet de Zaragoza -el mayor hospital de Aragón-. Ocurrió el pasado lunes, forzó a evacuar la sala afectada, que estuvo precintada durante casi una hora, y desencadenó cuadros irritantes en garganta y ojos de personas que se encontraban allí y resultaron directamente afectadas.

La alarma saltó precisamente cuando, de repente, empezaron a sentirse mal las personas que se encontraban en esa sala, en la que en ese momento había un centenar de personas con divresas patologías. Era evidente que eso lo estaba provocando un agente irritante, pero, al desconocerse con precisión la sustancia de que se trataba y su peligrosidad, se desalojó inmediatamente la zona y se ventiló. Cuando se dio por despejado el riesgo volvió a abrirse este espacio de Urgencias, que permaneció precintado durante 45 minutos.

El hospital lo puso en conocimiento de las fuerzas de seguridad . La denuncia de la Administración llevó a abrir una investigación policial que ha identificado a T. V. T., de 33 años, como autora de los hechos. Además, durante las diligencias se han investigado a otras tres personas relacionadas con ella.

Fuentes policiales han indicado a ABC que, de las investigaciones practicadas y de los testimonios recabados, se desprende que todo apunta a que fue un acto vandálico, una grave gamberrada de la que, eso sí, ahora tendrá que responderse ante la Justicia por la vía penal.

Además de los delitos de lesiones -por las personas que resultaron afectadas con cuadros por irritación de garganta y ojos-, el delito de desórdenes públicos que se le imputa está castigado con penas que van de los seis meses a los tres años de prisión, que pueden elevarse hasta seis años si concurren circunstancias agravantes.

Según las mismas fuentes, la acusada descargó al completo un frasco de spray de gas pimienta, de los que suelen ser utilizados como autodefensa.

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