Page contesta a Iceta: «Si el PSOE tiene que darle la vuelta a las letras será español antes que todo lo demás»

El presidente de Castilla y La Mancha responde al líder del PSC mientras el Gobierno minimina la crítica

El líder del PSC, Miquel Iceta, durante una rueda de prensa en la sede de la formación Pep Dalmau
Víctor Ruiz de Almirón

Esta funcionalidad es sólo para registrados

Otra vez. Como ya hiciera en la campaña electoral de las elecciones catalanas de diciembre de 2017 al hablar de los indultos, el primer secretario del PSC, Miquel Iceta , vuelve a perturbar una campaña electoral con sus posicionamientos políticos tendentes a cortejar los planteamientos del nacionalismo.

Las palabras de Iceta planteando la necesidad de abrir un cauce político si en el futuro un 65% de la sociedad catalana opta por la secesión han sentado muy mal en el PSOE, aunque la voluntad es dejar correr el tema para que no centre la actualidad. « Es tremendo . Nos ha costado mucho tener el relato que tenemos ahora como para estropearlo así», plantea un cargo de La Moncloa, en referencia a la apuesta de Sánchez por explotar su posición central entre independentistas y el bloque a su derecha. En la última semana, Pedro Sánchez ha protagonizado dos actos rodeado de banderas de España, ejemplo claro de su intento de ocupar una parte del espacio de Cs.

Solo el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page , alzó la voz en las filas socialistas. Page pidió a Iceta no perderse «en un porcentaje u otro» porque eso es «pedir a la gente encubiertmente que vote a los independentistas». El barón socialista ha considerado que es «de todo punto incomprensible que se abra ese debate porque «lo que afecta a los españoles lo vamos a decidir todos los españoles». Y, sobre ello, afirmó, refiriéndose directamente a Iceta, que «es algo que convendría que algunos se releyeran todos los días para no equivocarse».

«Falsas expectativas»

Page fue el único que se enfrentó abiertamente a los planteamientos de Iceta y no se ahorró nada. Page le pidió que «recuerde con claridad que ninguna parte de España decide por su cuenta». Y denunció que «el simple hecho de especular con ello es alimentar las falsas expectativas de los independentistas». El presidente autonómico rechazó que los socialistas puedan llegar a aceptar un referéndum en Cataluña: «Si el PSOE tiene que darle la vuelta a las letras será español antes que todo lo demás».

En el Gobierno las palabras de Iceta no gustaron, pero ni mucho menos se optó por la reprimenda pública. El secretario de Organización, José Luis Ábalos, valoró las palabras como un mensaje que «resulta inapropiado». Durante una entrevista en televisión, y con ese recuerdo de 2017 muy fresco, Ábalos cuestionó su exceso: «El compañero Iceta es muy dado a hacer reflexiones» . Pero no quiso entrar a opinar concretamente sobre el fondo de sus palabras. «Tenemos que trabajar para que eso no se dé. Yo no juego a eso. Mis futuribles son consecuencia de lo que yo pueda hacer. No me planteo ese escenario del 65%. Trabajare para que eso no se dé».

En otra entrevista, la vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo, defendió que Iceta es «un socialista antiindependentista» restando así trascendencia a sus palabras, pero recordando que España «no tiene estructura jurídica para que nadie la rompa».

Iceta sigue matizándose

Mientras tanto, Iceta siguió ayer asegurando que, en su opinión, la celebración de un referéndum de independencia no es la solución que necesita Cataluña. Lo hizo desde Mataró (Barcelona), en un acto de partido: «La solución para Cataluña no es ni la independencia ni un referéndum para la independencia, es un acuerdo sobre autogobierno y financiación que concite un apoyo mayoritario».

Por su parte, tanto desde el PP como desde Cs se insistió en poner de manifiesto la contradicción entre el PSOE y el PSC. Cayetana Álvarez de Toledo (PP) dijo en RNE que «Iceta no tiene principios, criterios, escrúpulos, ni remedio». Y añadió que, en su opinión, «sus declaraciones demuestran que el PSOE de Cataluña es uno de los grandes problemas de los españoles».

Inés Arrimadas (Cs), desde Alicante, criticó que los socialistas pongan «fecha de caducidad» a la unidad de España -en referencia al tiempo de diez años que Iceta auguró como posibilidad para la secesión- y abogó por poner «fecha de caducidad» al «sanchismo» el próximo 28 de abril, en las urnas. La portavoz de Cs destacó que, desde su punto de vista, Sánchez «mira para otro lado» en este tema, por lo que «es una emergencia nacional sacarle de La Moncloa, a votos».

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación