Moción de censura

Gana Puigdemont

Torra quiere un nuevo Estatut dentro de la Constitución

Pedro Sánchez presidente del Gobierno tras ganar la moción de censura

El expresidente durante la entrevista emitida en TV3 ABC
Salvador Sostres

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Yo soy el que escribió que, como siempre, Rajoy iba a ganar, porque podía entender que los independentistas quisieran destruir España pero no que el segundo gran partido de la nación estuviera dispuesto a colaborar con ellos. Ciudadanos ha probado su propia medicina y un Sánchez incluso más oportunista que ellos les ha mandado al retrete de haber creado el caldo de cultivo para que el centro derecha moderado perdiera el poder y lo alcanzaran todos los populistas menos ellos.

El gran triunfador de la moción de censura es Carles Puigdemont , que quería una España inestable e ingobernable y Albert Rivera se la cocinó y Pedro Sánchez y Pablo Iglesias se la han servido perfectamente envenenada y justo al borde del colapso. Si Cataluña no consigue la independencia no será porque una cierta España no la haya ayudado con todas sus fuerzas.

Lo obvio es que Sánchez gana y Rajoy cae , pero quien ayer de verdad encontró el oro fue el forajido de Berlín, que ya tiene a España con las vergüenzas al sol y sumida en el caos, muy frágil y en manos de quienes tienen muchas otras prioridades antes de protegerla. Y el gran derrotado fue Rivera , que tras tanto mover el árbol vio como otros niños se le comían las nueces.

El sueño húmedo del independentismo se ha hecho realidad. Una España de irresponsables descerebrados les invita a la barra libre de su diálogo. Lo mismo que Zapatero pero en un contexto mucho más dramático. La próxima estación será la negociación de «un nuevo Estatut dentro de la Constitución» que los empresarios catalanes han reclamado y el president Torra ha dicho que ve «interesante». En catalán tenemos la expresión «embolica que fa fort» para referirnos al enredo sobre en enredo acumulado.

Volverán los fugados, saldrán los encarcelados (indultos), y haber declarado la independencia no sólo les saldrá casi gratis sino que habrá premio para los golpistas : un nuevo Estatut, que nos volverá a enfrentar en una guerra sucia y estéril. Eso sí, la independencia quedará reducida a piula que no explotó, para el desespero de los independentistas de verdad, y la tan pomposamente llamada «república catalana» será un souvenir que se venderá en los tenderetes para turistas de las Ramblas. Hay una empresa de Gratallops que está a punto de comercializar llaveros con la miniatura de las urnas que se usaron el 1 de octubre.

España, cualquier idea estructurada de España, quedará atada a la rueda como Nicole Kidman en Dogville. Ciudadanos habrá muerto antes de nacer y el PP tendrá que redefinir su proyecto , encontrar a un líder nuevo y cortar con los demonios de su presente y su pasado, que no son en absoluto ajenos a que Rajoy haya sido derrocado: es tan tentador como profundamente estúpido que el PP trate de ignorarlo. Podemos y el socialismo más ramplón de todos los tiempos blanquerán su ignominia en los dos largos años que por lo menos van a estar en el poder.

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