Según el Gobierno gibraltareño, el buque de guerra español ordenó a varios barcos civiles que estaban fondeados en la zona oriental de la costa de Gibraltar que abandonaran esa aguas pero los buques decidieron mantenerse en su posición.
Posteriormente, la Marina británica salió al encuentro del patrullero español que, según la versión gibraltareña , navegaba junto a la costa con sus armas descubiertas y con militares operándolas.
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesión