Barómetro del CIS de marzoLa preocupación por la corrupción se dispara 11 puntos en dos meses

El CIS de marzo recoge una acusada caída en los problemas de índole económica

Madrid Actualizado: Guardar
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El caso Nóos, que se cerró con la condena a Iñaki Urdangarin a seis años y tres meses de prisión. Las tarjetas «black», cuya sentencia dictó cárcel para Miguel Blesa y el exvicepresidente del Gobierno Rodrigo Rato por su gestión al frente de Caja Madrid y Bankia. El caso Pedro Antonio Sánchez, que ha acabado con el político del PP fuera de la presidencia de Murcia... Como ocurre cada vez que se acumulan los escándalos de corrupción, el barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) ha vuelto a registrar un nuevo repunte en la preocupación por el fraude.

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La encuesta correspondiente al mes de marzo ha confirmado la línea ascendente de los últimos meses al dispararse 7,5 puntos, hasta el 44,8 por ciento, después de que en febrero ya se produjera un avance de 3,5 puntos.

Con este incremento de 11 puntos en tan solo dos meses, la categoría relativa a la corrupción y el fraude se afianza como el segundo problema más mencionado, detrás del paro. Los datos conocidos ayer, no obstante, quedan muy lejos del máximo histórico de noviembre de 2014, cuando alcanzó el 63,8 por ciento.

El paro, primer problema

El trabajo de campo del barómetro se realizó entre el 1 y el 10 de marzo, con entrevistas a 2.487 personas en 255 municipios. Fue después de que se conocieran las sentencias de Nóos y la tarjetas «black», y coincidió con la declaración ante el juez del ya expresidente de Murcia, Pedro Antonio Sánchez. La reacción ciudadana a la dimisión del dirigente popular, hace tres días, no ha sido recogida en el sondeo. En la primera semana de marzo también se celebró en Barcelona el juicio por el saqueo al Palau de la Música.

El paro, mencionado por el 72,3 por ciento, una cifra similar a la de los meses anteriores, sigue siendo el primer problema de los españoles. Sin embargo, la encuesta del CIS muestra un acusado descenso en la preocupación por los problemas de índole económica. Si en febrero eran señalados por el 27 por ciento, en marzo ha caído 5 puntos, hasta el 22 por ciento.

Esta tendencia se ve reforzada por una mejor percepción de la situación económica. Al pedir que califiquen la situación actual, el 60,7 por ciento dicen que es mala o muy mala. Si bien es un porcentaje superior al del que la ve buena o muy buena (4,4 por ciento) o regular (34,3 por ciento), ese 60,7 supone una reducción de 1,4 puntos respecto a febrero. Sobre el futuro, el 22,6 por ciento -un punto más que en febrero- responde que la situación económica del país será mejor dentro de un año. El 42,8 por ciento piensan que las cosas seguirán igual de aquí a doce meses, y el 20,7 por ciento temen que empeoren.

Violencia contra la mujer

Además de las variaciones mencionadas en las categorías de la corrupción y los problemas de índole económica, destaca la administración de justicia, que pasa del 2 al 4 por ciento. La violencia contra la mujer registra un repunte de 1,8 puntos, del 1,6 al 3,4 por ciento. No se registraba una tasa tan alta desde marzo de 2008. En lo que va de año 16 personas han muerto víctimas de la violencia machista.

Tras el paro, la corrupción y la economía -los tres principales problemas para los españoles- se sitúan los políticos en general, los partidos políticos y la política (20,5 por ciento) y la sanidad (11,7 por ciento). La sanidad cae más de dos puntos después de cuatro meses rozando el 14 por ciento.

El listado de los diez principales problemas se completa con los de índole social (10,8 por ciento), la educación (10,3 por ciento), los relacionados con la calidad del empleo (6,5 por ciento), las pensiones (4,3 por ciento) y la inmigración (4,1 por ciento).

Respecto a la situación política persiste la percepción negativa de otros sondeos del CIS. El 70,9 por ciento de los encuestados en el barómetro la califican de mala o muy mala, frente a un 2,4 por ciento que la ven buena. Solo el 12,4 por ciento creen que la situación política mejorará en el plazo de un año.

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