El PSOE quiere recaudar 15.000 millones de euros más en impuestos en 2019

Pedro Sánchez fiará la viabilidad de su política presupuestaria a una subida de impuestos a las grandes empresas, herencias y patrimonios así como tributos medioambientales que aumentarán la recaudación de las arcas públicas. El secretario del PSOE presentó junto a su responsable económico, Jordi Sevilla, la hoja de ruta del partido en la materia. En un acto en Madrid definió las medidas como «un programa de Gobierno».

Uno de los principales objetivos de la formación es elevar dos puntos la presión fiscal española, en la actualidad en el 38% del Producto Interior Bruto. Para ello, prevé un aumento de los ingresos para el año 2019 frente al actual de 25.000 millones de euros. Este incremento de la recaudación se producirá por 15.000 millones de euros de subidas de impuestos

y otros 10.000 millones por la lucha contra el fraude.

Para el pilar de los impuestos, el PSOE pretende elevar la tributación de las grandes empresas. En esta línea impondrá un tipo mínimo de Sociedades del 15% sobre el resultado contable. En la actualidad, el tipo nominal del Impuesto es del 28%, pero las exenciones llevan el tipo efectivo a cifras más bajas. La medida supone un aumento de la tributación de las mayores compañías del país. Los grupos consolidados pagan un tipo efectivo de Sociedades del 6%, si bien gran parte del resultado contable de estas empresas procede de fuera de España, ya que son multinacionales que en parte tributan fuera de nuestro país. En el resto de las compañías, incluyendo las pymes, el tipo es del 14,9%. El programa del PSOE también recoge un tipo del 35% para las empresas que incurran en «esquemas de planificación fiscal agresiva».

Lucha contra el fraude

De cara a las clases medias trabajadoras, el líder de los socialistas se comprometió a «no subir» los impuestos. El documento no especifica ninguna modificación ni en IRPF ni en IVA. Donde hay cambios es en el Impuesto de Sucesiones y el de Patrimonio, ambos de gestión autonómica, en los que pretende fijar un mínimo común a todas las regiones. Comunidades como Madrid han eliminado ambos impuestos en la práctica, por lo que el PSOE quiere asegurar que todas las autonomías tributen a las herencias y la riqueza. A partir de ese mínimo, cada comunidad tendría capacidad para aumentar el tipo.

En lucha contra el fraude, la formación desvelará los nombres de los defraudadores acogidos a la amnistía fiscal. Sin embargo, esta medida supone reformar el artículo 95 de la Ley General Tributaria, que protege la confidencialidad de los datos fiscales de los contribuyentes. Por ello, el programa socialista especifica que lo modificará «dentro de los límites constitucionales». La lucha contra la economía sumergida también supondrá un aumento de la plantilla de la Agencia Tributaria en 5.000 empleados. El organismo, además, tendrá competencia para inspeccionar a las Sicav. Estas sociedades de inversión colectiva ya estaban supervisadas por la Agencia, pero el PSOE decidió en 2005 darle la competencia a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

Arropado en primera fila por Irene Lozano y Zaida Cantera, las «independientes» cuya incorporación a la lista por Madrid ha levantado ampollas entre las filas socialistas, Sánchez aseguró que con ese programa firmaba «un contrato» con los españoles. Acusó a Rajoy de haber propiciado una «austeridad ideológica e injusta que ha generado una España más desigual». El socialista llegó al acto tras aterrizar de un vuelo desde París que sufrió retrasos por lo que postergó la presentación por la tarde tras reunirse con el presidente galo François Hollande. Sánchez criticó al presidente del Gobierno por presentar «unos Presupuestos falsos» y por incumplir el déficit. Y ahí lanzó un mensaje a la UE al comprometerse a reducir el déficit público hasta el 1% del PIB en 2019. Ello supondría una relajación del objetivo actual, ya que el Gobierno pretende bajarlo al 0,3% en 2018.

El programa de gasto que el PSOE quiere implementar, con medidas como el ingreso mínimo vital, requerirá de un importante alza de la recaudación. Para ello implantará cinco nuevos tributos medioambientales e impulsará el impuesto sobre las transacciones financieras.