Lamaignere aterriza en México de la mano de Azvi

Las familias Herrero (Lamaignere) y Contreras (Azvi) han vuelto a asociarse, aprovechando las sinergias que genera la relación comercial entre el operador logístico y la constructora. Las dos empresas sevillanas han creado la sociedad Lamaignere Cargo México, una filial de servicios logísticos y transporte internacional, con sede en el país americano, enfocada, inicialmente, a dar cobertura a empresas españolas que trabajan en ese mercado.

La base de esta alianza es la línea ferroviaria que Azvi está construyendo entre Toluca y México DF. Lamaignere es la gestora del transporte de los materiales necesarios para realizar este proyecto desde España y otros puntos de Europa. Se trata de cargas especiales, en concreto de 15.000 toneladas de raíles, que han sido enviados desde el puerto de Gijón en seis embarques; y sujeciones y utillaje diverso, que han viajado en más de 340 contenedores desde el puerto de Rotterdam con destino Toluca a través de Veracruz.

A partir de este trabajo, Lamaignere Cargo México ha cumplido un segundo objetivo: dar servicio directo en México a Airbus. La compañía aeronáutica es uno de los principales clientes de la firma de logística sevillana, que hasta ahora le prestaba apoyo en el país americano a través de un corresponsal. «A partir de aquí llamaremos a las puertas de otras empresas españolas que tienen actividad en México y que pueden necesitar nuestro servicio, como Indra o Gamesa», apunta el director general de Lamaignere, Francisco Herrero Maldonado.

Esta es la segunda filial conjunta de Azvi y Lamaignere, que en 2005 ya se unieron para el mismo negocio en Chile creando un operador local.

Dentro de su plan de internacionalización, la compañía de la familia Contreras también dio un paso significativo en enero de 2015 con la apertura de oficina en Miami para dar servicio a Airbus, y que ahora está en fase de captación de más clientes locales.

Lamaignere prevé facturar este año alrededor de 26 millones de euros y crecer en torno al 20% en 2017, hasta superar los 31 millones, gracias a la aportación de la nueva empresa mexicana y al crecimiento de la sucursal estadounidense. El grupo, que opera en transporte marítimo, aéreo y terrestre y también en aduanas, tiene plataformas en los principales puntos de entrada y salida de mercancías de España, como el puerto y el aeropuerto de Sevilla; Barcelona, Madrid, Valencia, Cádiz, Algeciras, Las Palmas y Tenerife. Otras patas son la consignataria Lamaignere Shipping y la participada Estibadora Sevillana, donde está junto a socios como Filomeno Aspe y Vapores Suardíaz.