Konecta hará compras por Europa tras consolidarse en Iberoamérica

Konecta ha vivido doce meses decisivos para su historia. Esta compañía especializada en la externalización de procesos de negocio selló, hace ahora un año, el desembarco del fondo de capital riesgo PAI Partners —una de las principales firmas de «private equity» de Europa— que tomó el 40% de los títulos. Tras esta operación, Banco Santander poseía otro 40%, mientras que su fundador y presidente José María Pacheco controlaría el 20% restante (es decir, el mismo porcentaje que antes de la operación). El gran objetivo de este movimiento era lograr que la compañía alcanzara los 1.000 millones de euros de ventas en cuatro años (lo cual suponía, en la práctica, doblar su tamaño, ya que sus ingresos en el momento de la operación rozaban los 500 millones).

En septiembre de 2016 esa hoja de ruta ya es prácticamente una realidad. En estos días acaba de cerrar definitivamente la compra de Allus Global BPO, una de las mayores empresas del sector en Latinoamérica, tras desembolsar más de 170 millones de euros. Una operación que se suma a la adquisición el pasado mes de junio de B-Connect, filial de la Corporación Interamericana de Entretenimiento (CIE). Para la absorción de ambas compañías, Konecta ha realizado una ampliación de capital por importe de 80 millones de euros, a cuya suscripción han acudido la totalidad de los actuales accionistas.

«Vamos tan rápido que el plan de negocio ha saltado por los aires, el crecimiento orgánico se está cumpliendo tal como habíamos estipulado y los ingresos ascienden a 500 millones de euros con un ebitda de 45 millones, pero estas dos adquisiciones nos han dado una dimensión muy distinta y en 2016 alcanzaremos los 800 millones con un ebitda de 85 millones», indica el sevillano José María Pacheco, que añade que con la incorporación de ambas compañías «hay un avance muy importante en el plan de internacionalización, ya que el 60% del resultado de explotación se logra fuera de España». En paralelo, el principal cliente de Konecta (Banco Santander) ya supone menos de un 15% de los ingresos, con lo cual «se ha diversificado de manera muy notable la cartera de empresas que trabajan con la compañía».

A partir de ahora el grupo tiene nuevas metas. «No todo es el volumen, estamos en un sector donde el desarrollo tecnológico es cada vez más importante y con estas adquisiciones hemos ganado muchísimo valor añadido», remarca Pacheco. En este sentido, Allus Global tiene en Colombia uno de los centros más avanzados del mundo para procesos de externalización de servicios y software en el sector bancario y en Argentina hay un equipo muy especializado en redes sociales. «Nos capacitan para dar el salto a la omnicanalidad, que es la capacidad de atender a los clientes de manera uniforme en cualquier canal, y ganamos masa crítica para investigar y estar en la vanguardia de este sector».

Además, la ampliación de capital le ha dado músculo para seguir acometiendo adquisiciones. «Nuestro endeudamiento es inferior a dos veces el ebitda, con lo cual podemos estudiar compras en mercados europeos maduros como Alemania e Italia que nos acerquen aún más a los 1.000 millones de euros de ventas».

A corto plazo, Konecta está trabajando en la definición del modelo societario y en la gestión futura del grupo resultante de la compra de Allus Global y B-Connect. «Captaremos un 75% de las sinergias previstas en el próximo ejercicio», adelanta su presidente. Ya partir de ahí, seguirá su camino para convertirse en el líder global de su sector.

Inversión en Sevilla

Konecta tendrá nueva sede en Sevilla, en el antiguo edificio de Ceade en Isla de la Cartuja, donde está invirtiendo más de un millón de euros para acondicionar las instalaciones. En un principio albergará a 450 empleados, pero tiene capacidad para 800 trabajadores (el objetivo es elevar su plantilla en Sevilla a medida que se consigan nuevos clientes). Konecta es un referente en la prestación de servicios externalizados como la atención y retención de clientes, gestión de cobros, marketing o ventas.

«Somos el segundo mayor grupo de habla hispana y hemos entrado en los primeros puestos del ranking mundial», afirma José María Pacheco. Esta compañía respalda a grandes empresas en sectores como el financiero, las telecomunicaciones, la energía y las administraciones públicas. Uno de sus servicios es la campaña de la declaración de la renta, donde gestiona desde la cita previa hasta el envío de la declaración y los pagos finales. Aunque popularmente a estas firmas se las conoce como «call center», solo un 20% de su plantilla atiende el teléfono, ya que la mayoría presta servicios de valor añadido como la asesoría jurídica, la gestión documental o la asistencia tecnológica.