Las operaciones con tarjeta triplicaron las de retirada de efectivo en los cajeros en 2017
La CNMC destaca que el cambio en la política de comisiones que se produjo en julio de 2015 ha alterado los hábitos de los consumidores
Las operaciones con tarjeta de crédito triplicaron las de retirada de efectivo en los cajeros en 2017, una tendencia iniciada el año anterior y que a futuro podría verse alterada por las nuevas formas de pago , como el reintegro de dinero o los pagos entre usuarios a través del móvil.
En su segundo informe sobre la retirada de efectivo en los cajeros automáticos, relativo a 2016-2017 y con avance de datos de 2018, la CNMC destaca que el cambio en la política de comisiones que se produjo en julio de 2015 ha alterado los hábitos de los consumidores, que ahora sacan menos veces pero más cantidad de dinero y que recurren más a los cajeros de su entidad.
Señala también que las entidades que establecieron menores comisiones por el uso de tarjetas tras el cambio normativo de 2015 han disparado sus operaciones, y que las comisiones se han mantenido estables desde ese año. El nuevo sistema de comisiones ha propiciado también un aumento de las operaciones de aquellas entidades con menores comisiones y un repliegue de los clientes hacia sus propias entidades.
El cambio en la política de comisiones ha generado un cambio en los patrones de comportamiento de los usuarios, que reducen el número de transacciones que realizan en entidades ajenas y aumentan el valor de las retiradas más de lo que se registra cuando hacen esas mismas operaciones en cajeros de la propia entidad.
Al mayor número de operaciones con tarjeta se suma la reducción del valor medio de las mismas, que ha pasado de 52 euros de media en 2005 a 40 euros de media en 2017.
La tendencia decreciente en el reintegro de dinero se ha visto favorecida por la aparición de nuevos medios de pago como la retirada de efectivo a través de una aplicación móvil o las transacciones directas entre consumidores.
Frenazo en la caída de cajeros
El informe revela que en 2016 y 2017 se ha frenado la caída en el número de cajeros que se había observado con la crisis (cayó de 61.714 en 2008 a 49.864 en 2015), de forma que al cierre de 2017 se sitúan en 50.839.
No obstante, la CNMC cree que es pronto para saber si se trata de un factor coyuntural o bien es el paso a una nueva tendencia en la que cobre más importancia el pago con tarjeta o por medios alternativos, en detrimento del pago en efectivo. Igualmente, constata que se mantiene la concentración de los cajeros en un número muy limitado de entidades , ya que las seis grandes tienen un 61% de la red de cajeros.
Desde 2015 España ocupa la quinta posición en la UE por número de cajeros y cuenta con un terminal por cada 996 habitantes. El mayor número se concentra en Cataluña, Madrid y Andalucía, en tanto que el menos está en Ceuta, Melilla, La Rioja y Cantabria.
