No cuente conmigo

Sánchez tiene materia suficiente para dotar de contenido a su programa electoral: las pensiones suben, como lo hacen los salarios de los funcionarios y el de los que cobran el mínimo. Sume, son mucha gente

El perjudicado será el déficit público, ya que no habrá manera de cuadrar los gastos comprometidos REUTERS

IGNACIO MARCO-GARDOQUI

En el debate del miércoles en el Congreso se certificó la defunción de los Presupuestos «non natos» del presidente Sánchez. Allí se habló de todo menos de Presupuestos. Me refiero a su contenido, que no pareció importarle a nadie de los presentes en el Congreso, con la única excepción parcial de la ministra Montero que los había gestado, pero que optó por defender a su jefe en lugar de a su hijo. Unos Presupuestos que solo se los creyó el Gobierno y Podemos que los había inoculado de sus postulados más extremos y que habían recibido las dudas y el rechazo de cuantos organismos nacionales e internacionales opinaron sobre ellos.

Con este resultado nos libramos de una espectacular subida de impuestos , que iban a «extraer» bastante más de 10.000 millones del sistema económico, lo que nos empujaría de manera irremediable hacia la recesión. Por el contrario, y a pesar del rechazo, Sánchez tiene materia suficiente para dotar de contenido a su programa electoral : las pensiones suben, como lo hacen los salarios de los funcionarios y el de los que cobran el mínimo. Sume, son mucha gente.

El perjudicado será el déficit público, ya que no habrá manera de cuadrar los gastos comprometidos con unos ingresos no cebados, pero la realidad demuestra que, en este país, somos muy pocos los que sufrimos por él, solo unos pocos quienes nos duele su aumento.

Otra derivada negativa será la vuelta a la sala de espera del Pacto de Toledo , que avanza de manera desesperadamente lento en tiempos de calma política (usted no se acuerda, pero ha habido unos pocos) y que encalla en cuanto las cosas se crispan. Eso arruina la posibilidad de acordar mecanismos que palien el roto que provocará la subida de las pensiones y que aupará el déficit del sistema hasta las proximidades de vértigo de los 20.000 millone s de euros.

Así que no resulta extraña la previsión realizada por la Airef que sitúa a la deuda pública en el 130% del PIB del año 2048. Y mientras tanto, toda la izquierda clamando en contra de los ajustes y bramando en contra de los recortes. ¿Cuándo se detendrá y quién pagará esta locura del déficit? Como no le puedo garantizar que vaya a estar presente en fecha tan lejana, no cuente conmigo para el escote.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación