El gigante de las latas refresca el empleo de Guadalajara

Ball Corporation redobla su apuesta por España con una nueva fábrica que empleará a 125 personas

Daniel Caballero

Cabanillas del Campo es el quinto municipio con más desempleados de Guadalajara; el número 54 de Castilla-La Mancha; y el 833 de España. Un 13,23% es la tasa de paro que carga a sus espaldas este pueblo castellano que ahora tiene en una multinacional estadounidense una oportunidad para proseguir en su recuperación a pasos agigantados. Ball Corporation ha inaugurado allí su nueva planta de producción de latas de bebidas. Un proyecto que despierta ilusión en toda la región al aterrizar en sus tierras una empresa que en 2017 tuvo unas ventas netas de 11.000 millones de dólares .

La compañía dará empleo directo a 125 personas. Unos puestos cubiertos en su mayoría por población de la zona. Esto, teniendo en cuenta que el paro en el sector industrial en Cabanillas del Campo era de 37 trabajadores hasta agosto, supondrá un gran impulso para el empleo del pueblo, aunque Ball arrastra una asignatura pendiente: la inclusión de la mujer en la fábrica. Solo un 14% de los trabajadores serán mujeres.

La nueva planta –la segunda de la multinacional en España tras la que tienen en Tarragona– fue inaugurada el pasado 26 de septiembre. Y a la cita no faltaron representantes de todas las administraciones. Asistieron el alcalde de la localidad castellana, José García ; el presidente de la Junta de Castilla-La Mancha, EmilianoGarcía-Page ; y la ministra de Trabajo, Magdalena Valerio , entre otras muchas personalidades políticas. Una cita marcada en rojo en su calendario para apoyar la implantación en la región del mayor productor de latas del mundo.

Las obras comenzaron en julio de 2017 y finalizaron el pasado mes de junio. Culminaron con una planta de 17.000 metros cuadrados y una capacidad de producción de 1.600 millones de latas al año. Esto, sumado a las 3.500 millones que fabrican en Tarragona, les sitúa como los «reyes» del sector en España, un mercado que consume unas 7.500 millones de latas anuales.

«Mahou es nuestro principal cliente de esta fábrica» , señala José Ignacio Comeng e, máximo dirigente de la filial de Ball en España. De hecho, en la inauguración de la nueva planta solo pudieron verse envases de esta marca en las líneas de producción. Sin embargo, son otros quienes copan su principal atención a escala nacional. «En España es Coca-Cola, seguido de Damm y Mahou. Heineken y Estrella Galicia también son importantes», afirma Comenge.

Pese a todo, sus esfuerzos no solo van enfocados a las grandes marcas. Otras más modestas, como el caso de la cerveza artesanal Arriaca, de Guadalajara, también están entre sus clientes en España. Así las cosas, tanto gigantes de la bebida como los más locales podrán disfrutar de una de sus últimas innovaciones: en Cabanillas producirán la lata de 330 ml más ligera de su red europea , de apenas unos pocos gramos.

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