El «boom» del ladrillo eleva los ingresos de las comunidades un 12%
El Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales recaudó hasta abril 2.852 millones por el alza de compras de viviendas, máximo desde 2008
El desplome de ingresos de las comunidades autónomas fue la consecuencia lógica de la crisis inmobiliaria: una jugosa parte de lo que recaudan las regiones se basa en tributos que gravan las operaciones inmobiliarias. En el momento en el que estas se hundieron, así lo hicieron las arcas públicas regionales y se disparó su déficit. Ahora, en pleno despertar de las compraventas de viviendas, la situación está volviendo a aproximarse a lo que ocurría hace años. La recaudación del Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados (ITP y AJD) hasta abril ha crecido un 12,3% hasta los 2.852 millones de euros , una cota que no se veía desde 2008, año en el que estalló la burbuja inmobiliaria.
La causa de este despertar de impuestos que estaban de capa caída está en el espectacular aumento de las compraventas de vivienda, que en lo que va de año crece a un ritmo similar, con un 11,6% más de compraventas hasta las 217.539 operaciones, según las estadísticas del INE entre enero y mayo. Este incremento se dio con mayor fuerza entre las compraventas de segunda mano, que están más gravadas en el impuesto, y crecieron un 13%. Pese a ello, el nivel aún está lejos de los más de 8.000 millones que ingresaba en 2006 el tributo en este mismo periodo , según la IGAE.
La salud de la actividad inmobiliaria marca en buena parte la de las finanzas de las comunidades autónomas, ya que sus ingresos son muy sensibles: crecen al calor de periodos de expansión y se desploman en épocas de vacas flacas con especial intensidad. La recaudación procedente de ITP y AJD supone en torno al 15% de sus ingresos por impuestos y hasta abril, el déficit autonómico se redujo un 31,2% hasta el 0,2% del PIB. La reforma del modelo de financiación tenía entre sus objetivos hacer que los ingresos regionales, que financian servicios como Sanidad y Educación , fueran menos coyunturales.
Hasta entonces, la recaudación de ITP y AJD es un buen termómetro. Donde más sube en los cuatro primeros meses en términos acumulados es en Valencia (un aumento de 87 millones), Andalucía (46) y Madrid (con 40), zonas en las que el aumento de la compraventa es intenso. No obstante, hay otro factor que explica el tirón de los ingresos. El Consejo General de Economistas advirtió hace unos meses al presentar el Panorama de la Fiscalidad Autonómica que la competencia fiscal entre comunidades había elevado el impuesto en los últimos años , quizá debido al desplome de la recaudación tras 2008. Este año lo ha subido Cantabria , sin ir más lejos.
Para transmitir una casa que no sea vivienda habitual por un valor de 150.000 euros, las comunidades con una mayor presión fiscal son Cataluña, Galicia, Cantabria y Comunidad Valenciana , con una factura de 15.000 euros, mientras que Madrid, con 9.000, y Canarias, 9.750, son las que menos gravan estas operaciones en este caso. Las comunidades que más recaudan son Baleares (1,9% de su PIB en 2016), Valencia (0,91%), Andalucía (0,89) y Cataluña, con 0,78%. Las que menos, son regiones en el que el sector tiene un peso reducido o el tributo está fuertemente bonificado, como País Vasco, Navarra o Galicia.
Financiación aplazada
Lo cierto es que la velocidad de crucero de la economía provoca que las regiones vayan a recibir este año los mayores ingresos de su historia. Este hecho, unido a la salud de impuestos como ITP y AJD, en cierta forma resta presión a la reforma del modelo de financiación, que el Gobierno de Pedro Sánchez ya ha postergado para la siguiente legislatura, lo que significa que llegará con hasta seis años de retraso de cuando debería haberse revisado, en 2014. El Consejo de Política Fiscal de hace unos días escenificó una batalla campal con la demora como uno de los grandes ejes, aunque la recaudación vuela en globo.
