Soria: «El presidente de Volkswagen confía en que las inversiones en nuestro país no peligren»

–¿Está el Gobierno preocupado por las consecuencias que pueda tener en la industria del automóvil en nuestro país el escándalo de Volkswagen?

–A raíz de la investigación llevada a cabo por la Agencia Federal Americana de Protección Medioambiental, me he puesto en contacto directo con Volskwagen a través de una carta y en varias conversaciones telefónicas con su vicepresidente mundial, Francisco Javier García Sanz. En ella le expreso mi preocupación por lo sucedido y le solicito que nos facilite cuanto antes toda la información necesaria para determinar el alcance del problema en general y de manera específica en nuestro país. Necesitamos información concreta sobre cuántos vehículos, de los 11 millones que hay afectados, pueden haberse vendido , en su caso, en el mercado español.

Por último, le he preguntado por las acciones y medidas concretas que proponen para solucionar el problema.

–Francia, Italia y Corea, ya han pedido a la UE que abra una investigación, ¿hará lo mismo España? ¿Se tomarán medidas específicas para despejar incertidumbres de clientes e inversores?

–En España consideramos que el asunto debe ser tratado de una manera conjunta por las instituciones europeas, ya que cuestiones como la contaminación ambiental, la producción industrial y la capacidad competitiva de la industria europea son aspectos esenciales para todos los países de la Unión. Por este motivo, he propuesto a la comisaria europea de Mercado Interior, Industria, Emprendimiento y de la PYME, Elzbieta Bienkowska que, con carácter de urgencia, se organicen las reuniones necesarias para que todos los Estados miembros, junto con la Comisión, puedan analizar la información disponible y valorar las posibles acciones.

–¿Están en peligro las inversiones que Volkswagen anunció para SEAT en Navarra y Barcelona?

–Confiamos en que esta situación no afecte a las importantes inversiones que el grupo tiene anunciadas en las dos fábricas que tiene en nuestro país. Así me lo ha hecho saber personalmente el vicepresidente mundial del grupo.

–¿Se endurecerá la regulación?

–En Europa tenemos un sistema de homologación mucho más garantista que en Estados Unidos. La reglamentación Europea establece las condiciones técnicas que deben cumplir los vehículos y además establece que una entidad tercera independiente (servicios técnicos) deben comprobar y certificar su cumplimiento, y que en base a ello la administración de un Estado miembro emita un certificado de homologación. Esta homologación es un requisito previo para la matriculación de los vehículos.

Además, cada modelo está sometido al cumplimiento de los requisitos de unas 50 reglamentaciones técnicas europeas (luces, frenos, choques, ruido, emisiones, etc), y para cada una de ellas es necesaria la intervención de un servicio técnico, que realice los ensayos que marca la reglamentación y emita el correspondiente certificado y la posterior homologación de la administración. Es un sistema, como digo, garantista, y aún es pronto para saber si se necesita una regulación.