El Ibex 35 se desploma un 4,56%, la mayor caida desde agosto de 2012, por el «corralito» impuesto en Grecia

La Bolsa española ha caído hoy un 4,56 % y ha perdido los 10.900 puntos. La Bolsa española, que comenzaba la sesión con un fortísimo descenso del 5,25%, lideraba las caídas en Europas a mediodía y se dejaba un 3,74% lastrado en gran medida por la banca. La situación de Grecia, que ha anunciado un corralito para prevenir la masiva huida de capitales tras la ruptura de las negociaciones con Europa, ha provocado que finalmente la caida del selectivo español se cifre por encima del 4,50%, el mayor desplome desde agosto de 2012.

En línea con el parqué nacional, el resto de mercados europeos también cotiza con importantes pérdidas, sobre todo, los de los países periféricos, ya que Portugal y Milán caen más de un 5 %; mientras que París y Fráncfort pierden más de un 3 % y Londres casi un 2 %.

Las tensiones que provoca Grecia en el mercado han llevado al IBEX 35, a dejarse 518,40 puntos, el 4,56 %, hasta los 10.853,90 puntos, con lo que a un día de cerrar el mes pierde más del 3 %, mientras que la prima de riesgo ha repuntado con fuerza hasta los 156 puntos básicos.

El empeoramiento del mercado de deuda ha afectado sobre todo a la banca nacional, que ha sido el sector que más ha arrastrado al IBEX 35 en la sesión, en la que todos los grandes valores han terminado con abultadas pérdidas: Santander se ha hundido el 6,70 %; BBVA, el 6,02 %; Repsol, el 4,23 %; Inditex, el 4,20 %; Iberdrola, el 3,87 % y Telefónica el 3,86 %.

También se prevé una jornada de recortes en las Bolsas estadounidenses, tal y como anticipan los futuros de los principales índices. En Asia los mercados cerraban la sesión con fuertes pérdidas, que alcanzaban el 2,88% en Tokio, su mayor caída del año, el 3,34% en Shanghai, y el 5,70% en Shenzen.

Miedo en el mercado de deuda

Por su parte, la prima de riesgo superaba los 150 puntos, algo menos de los cerca de 160 puntos que alcanzó a primera hora, frente a los 120 del pasado viernes, lo que supone un descenso del 25%

La limitación a la salida de capitales de Grecia, el corralito, y la convocatoria de un referéndum el próximo domingo sobre los términos del rescate y la continuidad del país en la zona del euro eran recibidos con gran nerviosismo por parte de los inversores, tanto en renta variable como en renta fija.

Y en particular, los bancos eran los que en mayor medida acusaban el temor a una salida desordenada de Grecia de la zona del euro y la ruptura de la moneda única, una situación inédita de consecuencias imprevisibles.

Aunque el ministro de Economía, Luis de Guindos, quitaba hierro al posible contagio a España dada la situación actual de la economía, muy distinta a la de hace unos años tras las reformas emprendidas por el Gobierno, los inversores optaban por reducir en sus carteras la exposición a entidades financieras, tanto en Madrid como en el resto de plazas europeas.

El presidente de la Comisión Europea (CE), Jean-Claude Juncker, ha subrayado que "la salida de Grecia del euro nunca ha sido ni será una opción", al tiempo que ha rechazado las calificaciones de "ultimátum y chantajes" hechos por Atenas.