El fiscal acusa a Rato de defraudar 2,7 millones, pero Anticorrupción duda

La Fiscalía de Madrid denunció al exvicepresidente del Gobierno Rodrigo Rato el pasado 16 de abril de defraudar 2,76 millones de euros entre los años 2012 y 2013, según ha podido saber ABC de fuentes conocedoras de la investigación en la que le atribuyen cinco delitos fiscales, uno de alzamiento de bienes y otro de blanqueo de capitales en el manejo de su patrimonio personal.

No obstante, el exvicepresidente aseguró este miércoles a ABC que, según demuestra la información de las actuaciones judiciales, de las tres acusaciones, quedan prácticamente descartadas dos: el alzamiento de bienes, que ya fue puesto en duda por la Audiencia Provincial de Madrid, y el supuesto blanqueo de capitales. Sobre este delito, la Fiscalía Anticorrupción, en un escrito del pasado 7 de mayo, asegura que la denuncia inicial interpuesta por la Fiscalía de Madrid es "bastante inconcreta sobre los hechos que evidencien o sugieran un delito de blanqueo de capitales".

En relación con toda la investigación, el exministro aseguró este jueves que sus abogados demostrarán que no hay ningún delito penal en los hechos investigados por la Justicia en relación con su patrimonio personal, una vez que analicen "en profundidad" el sumario, cuyo secreto judicial fue levantado ayer de forma parcial por el juez de instrucción número 31 de Madrid, Antonio Serrano-Artal. Así lo defendió el exministro en declaraciones a Efe, en las que también desveló que sus letrados han denunciado la "escandalosa" filtración de información que se produjo en esta causa.

Sobre estas acusaciones, el exvicepresidente afirmó que "resulta palmaria" la ausencia del delito de alzamiento de bienes, que fue la sospecha que precipitó una intervención policial que califica de "desproporcionada y discriminatoria". Además, defendió que todas sus rentas, "de cualquier origen", están declaradas de forma correcta y según las leyes tributarias españolas.

Rato expresó también su "satisfacción" porque el magistrado haya levantado el secreto de forma parcial sobre las actuaciones, que todavía pesa sobre los documentos incautados en los registros de su domicilio y despacho profesional, unas horas en las que el exvicepresidente permaneció detenido por los agentes del Servicio de Vigilancia Aduanera durante varias horas.

Aún así, Rodrigo Rato tiene que pagar una fianza de 18 millones de euros si quiere que el juez levante el bloqueo que tiene decretado sobre todas sus cuentas, fondos y productos bancarios. El exministro también está imputado por la salida a Bolsa de Bankia y la emisión de las tarjetas opacas de Caja Madrid.