US Open

Gauff, Osaka y Serena: triángulo de amor y odio

La joven quinceañera se mide a la japonesa, a quien recuerdan la final de 2018 ante Williams

Cori Gauff, durante un entrenamiento EP

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La quinceañera Coco Gauff volvió a la pista el jueves por la noche tras imponerse en segunda ronda a la húngara Tímea Babos, entre la locura del público que abarrotaba la Louis Armstrong, la segunda pista del Abierto de EE.UU. La sensación del tenis estadounidense desde su irrupción en Wimbledon, donde llegó a octavos, recibía la ovación, gritos de «Coco, Coco» y la pregunta del entrevistador sobre su próxima rival, Naomi Osaka , de 21 años.

Del graderío, con capacidad para 14.000 personas -casi tan grande como las pistas centrales de Australia, Roland Garros y Wimbledon- salió un gemido a medio camino entre el abucheo y la expectación. Gauff, convertida en solo dos partidos en la niña bonita de Nueva York, se medirá esta noche con la número uno del mundo, tratada como una villana injustamente en la final del año pasado.

El partido se ha convertido en el momento cumbre de la primera semana del torneo en Queens. El cuadro masculino tiene una apariencia muy plana en esta edición , con los tres grandes -Novak Djokovic, Rafael Nadal y Roger Federer- con un camino despejado hasta cuartos. Sin duda habrá mucha menos expectación en el partido de tercera ronda entre el español, que se clasificó sin sudar por abandono del australiano Thanis Kokkinakis, y el coreano Chung Hyeon (20 horas) que en el duelo femenino. La Arthur Ashe se llenará para ver a las chicas en un partido con el peso de la historia (¿quizá el nacimiento de una rivalidad histórica?) y de cuchillos largos y rencillas irresueltas. No hay gato entre Osaka y Gauff. Aunque la número uno del mundo representa a Japón, buena parte de su formación tenística fue en uno de los paraísos de la raqueta en EE.UU., el sur de Florida. Allí también nació y se crió Gauff. Nunca se han enfrentado, pero en alguna ocasión han entrenado juntas . Los padres de ambas son amigos. Compartieron consejos y experiencias sobre los desafíos de criar y entrenar a adolescentes que son, a la vez, profesionales de un deporte muy exigente, en la preparación y en el bolsillo. Las jugadoras solo se han dedicado buenas palabras durante el torneo.

La polémica final de 2018

La tensión viene por la tercera punta de un triángulo de amor y odio: Serena Williams . En la final del año pasado, la papisa del tenis mundial iba a certificar su condición de mejor jugadora de la historia del tenis. Si ganaba, batía el récord de grandes de Margaret Court (24). Por allí pasaba Osaka, desconocida, tímida, sin cara de haber roto un plato y con un tenis descomunal. Serena perdió la compostura, tuvo un comportamiento lamentable en la pista, la juez le sancionó con justicia y armó el escándalo. Su actitud provocó que la pista central de Nueva York abucheara de forma vergonzosa a Osaka, la mejor aquella noche, dentro y fuera de la pista. La japonesa recibió su trofeo entre lágrimas .

El recuerdo de ese escándalo flota todavía en la Arthur Ashe, mientras ahora Williams avanza por la parte baja del cuadro y solo se enfrentaría a Gauff o Osaka en la final. Muchos querrán que Coco vengue a Serena. Se sintió nada más mencionar el nombre de Naomi en la Louis Armstrong.

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