Mutua Madrid OpenLas mejores promesas del tenis

Los tenistas del ahora, los que por edad deberían estar optando a los torneos más importantes del circuito, crecieron disfrutando del inagotable talento de Roger Federer, de aquel Rafael Nadal en piratas y sin mangas saltando hasta el infinito después de cada punto imposible, del rugido de Novak Djokovic para discutir el poder establecido y de la eclosión de un Andy Murray volcánico. El «Big Four», compuesto por estos cuatro monstruos del deporte, llevan toda una vida ganando, y resulta imposible imaginar una era tan gloriosa como la que han compartido estos jugadores, que han sabido respetarse para trasladar ese mensaje a los más pequeños. Federer ya jugaba a finales del siglo XX y los otros tres llevan más de diez años de título en título, por lo que es normal que fueran ídolos de todos los muchachos que soñaron en algún momento con ser como ellos.

Por varios motivos, ahora coinciden en el tiempo los veteranos con los noveles, en el fondo un privilegio para los miembros de esta nueva generación que la ATP quiere promocionar por la cantidad de kilates que hay entre la muchachada. El futuro ya está aquí y se podrá disfrutar estos días en el Mutua Madrid Open.

Hay una infinidad de proyectos sin cuajar cuando han asomado a las puertas de la elite, pues no todo el mundo puede pasar y hacerlo bien. En estos últimos tiempos, se han sucedido nombres de los próximos números uno, pero es ahora cuando todo parece indicar que sí, que hay mucho y muy bueno. Ya está en las alturas Dominic Thiem, nueve del mundo con 23 años, y por detrás se han consolidado jugadores como Lucas Pouille (23), Jack Sock (24) o el excéntrico Nick Kyrgios (22), probablemente el mejor proyecto si mantiene la calma y la compostura dadas sus condiciones y resultados. Y luego está la promoción del 87, que es buenísima, liderada por Alexander Zverev y con muchísimos jóvenes a seguir. Falta que cuajen y que saquen buena nota en un torneo como el de Madrid, pues aquí están los mejores.

Por encima de los 30

El tema no es nuevo y se han escrito puñados de artículos, con voces autorizadas analizando la situación. Hoy por hoy, es frecuente que el estallido de un tenista sea sobre los 25, e incluso más tarde, del mismo modo que los profesionales alargan mucho más sus carreras. «Puede que los chicos de ahora se distraigan un poco más, pero hay muchos que son buenísimos», reflexionaba Carlos Moyá. Roberto Bautista, que es de esos de florecer tardío, aporta su visión. «La gente se cuida mucho más, aguanta hasta más tarde. Hay muchos jugadores por encima de los 30 años jugando y ganando. Los que tienen 18 años están muy verdes comparado con esos veteranos que se mueven desde la experiencia», concluye el castellonense, que cuenta 29 primaveras.

Se presenta, pues, una mezcla de edades muy interesante. «Hemos estado jugando en el circuito durante un montón de años sin una promoción como la que tenemos hoy. Hay una nueva generación de jugadores muy jóvenes que son muy buenos. Y eso es algo que ocurrió durante toda la historia de nuestro deporte. Esto es lo que debe suceder, y finalmente ha sucedido. Así que es bueno para el tenis y es bueno para el circuito y para los aficionados», apunta Rafael Nadal, que se siente un veterano entre tanto niño y que ya ha podido comprobar el potencial de alguna de estas promesas en las últimas semanas como Alexander Zverev o Hyeon Chung.

Si se atiende a la clasificación de la ATP, se aprecia que hay doce tenistas del top 100 con 22 años o menos, comandado el pelotón de los rebeldes por Nick Kyrgios -17 del mundo al cierre de esta edición- y acompañado por Alexander Zverev (20), Kyle Edmund (41), Karen Khachanov (42), Borna Coric (54), Daniil Medvedev (65), Yoshihito Nishioka (67), Hyeon Chung (78), Jared Donaldson (79), Frances Tiafoe (80), Thiago Monteiro (81) y Ernesto Escobedo (85). Si se pasa de página, del 101 al 200 hay 22 en esa franja de edad, anticipando que vienen buenos tiempos. Y de los españoles, tan frecuente entre la afición el cargar con la etiqueta del próximo Nadal sin asumir que es imposible imitar al mallorquín, Jaume Munar es la promesa (se entiende promesa a alguien de 22 años para abajo) mejor colocada en el puesto 250 del ranking. Munar, también balear y seguido de cerca por Nadal, tiene ahora 19.

Si toca decir dos nombres entre los mencionados, casi todos responden igual: Kyrgios y Zverev. «Vamos a jugar muchas veces y me va a hacer mejorar mi tenis», acepta el australiano. El tenis del futuro ya brilla en el presente.