Dani Pedrosa
Dani Pedrosa - AFP

MotoGP | GP EspañaPedrosa sí sabe sonreír

El piloto logra su primera victoria desde San Marino 2016 y lidera un podio español con Márquez y Lorenzo, el mejor resultado del balear en Ducati

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Dani Pedrosa ha vuelto a sonreír. Aunque no se prodiga en estas circunstancias, al piloto de Barcelona pocas veces se le ha visto tan distendido como en este fin de semana perfecto para él. En su duodécima temporada de MotoGP, logra otra victoria para su historial, el primer triunfo en este 2017 que celebra desde la pole y con autoridad. Y la número 3.000 desde que se inciara el Mundial en 1949. Quizá la historia le debía este premio. Por fin Pedrosa, eufórico y emocionado en lo más alto del podio, recibiendo el trofeo de manos del Rey emérito Don Juan Carlos.

Para completar la fiesta en el Gran Premio de España, Marc Márquez fue segundo y Jorge Lorenzo, tercero.

También sonrisa enorme. Después de tanto sufrimiento, carrerón para firmar el mejor resultado de su curso en Ducati y primer podio en Jerez de la firma italiana desde 2011.

En este curso en el que los pilotos de la zona media aprietan a una vuelta en las rondas de clasificación, la pole se ha vuelto más importante que nunca. Lo supo enseguida Pedrosa, imperial desde el inicio hasta el final, sin importunarle nadie ni nada durante las 27 vueltas bajo el sol de Jerez. Consciente de su privilegiada posición, Pedrosa logró meter toda su intención de ganar en una primera vuelta en la que logró meter medio segundo de ventaja con respecto a Márquez, y confirmó con la segunda, en la que amplió la ventaja hasta el segundo y medio. Todavía se pudo aprovechar de una bonita batalla entre Johann Zarco y el 93, peleones ambos. No le inquietó demasiado, con la vista fija en su primer triunfo desde San Marino 2016. Y tampoco al final, cuando Márquez intentó cerrar la distancia. «Una carrera muy difícil, quise ir rápido, pero no estaba cómodo. He tenido que estar muy concentrado en estar por la línea y veía que Márquez estaba por detrás para meter presión. Pero me concentré en mí mismo y estoy contento por mí, por mi familia y por mi equipo».

Cuando a Zarco se le acabó la chispa, Márquez pudo centrarse en Pedrosa, pero sabía que este tenía un algo más y desistió tras acortar la distancia del segundo y medio a las ocho décimas. No tenía más que dar. «Me dije, la segunda plaza está muy bien, tranquilo», confirmaba el de Cervera.

Sin posibilidad de alcanzar al de Honda, Zarco fue sorprendido por un enemigo que no esperaba encontrar y al que cedió la tercera plaza. Jorge Lorenzo. Impresionante el balear, desatado de sus demonios y de las difíciles prestaciones de su Ducati con un pilotaje en Jerez a lo Lorenzo.

Salió octavo, pero se fue afianzando para superar a sus rivales y aprovecharse de las caídas. Le gustaba el circuito, pero era todavía más complicado para su moto. El corazón pudo más que la máquina y Lorenzo sube al podio por primera vez vestido de rojo. Un podio que parecía imposible hasta hacía unas pocas horas. Si bien es cierto que lideró durante unos instantes una de las sesiones de entrenamientos de este fin de semana, Lorenzo siempre fue consciente de que sería efímero. Y se dedicó a pilotar por pasión, por sensaciones y no por resultados, lo que le llevó a completar la carrera sin demasiados obstáculos una vez se deshizo de Zarco.

Fue el francés el único que supo sacar partido a la Yamaha en un circuito que, a priori, era mejor para ellas. Maverick Viñales sufrió demasiado para batallar con Iannone y Crutchlow, antes de que ambos se fueran al suelo. Al final, sexto. Y todavía padeció más infortunio Valentino Rossi, que terminó décimo. Todavía es líder, pero con solo dos puntos de ventaja sobre su compañero, pues la rueda no funcionó y no puedo defender la séptima posición de la parrilla. Y muy lejos ambos de brindar la victoria 500 para Yamaha.

El Mundial se pone más emocionante que nunca porque de Jerez sale líder Rossi (62), con Viñales a solo dos puntos (60) y con Márquez a cuatro (58). Se acerca, además, Pedrosa, con 52.

Ver los comentarios